Valdihuertos vuelve a la normalidad tras el desalojo de 97 residentes

La humareda se produjo pasadas las 22:00 horas del jueves, cuando tuvo lugar un apagón generalizado en la villa de Cuéllar que apenas duró unos segundos. En esos momentos uno de los generadores auxiliares del centro de mayores comenzó a funcionar, provocando una intensa humareda que hizo saltar los detectores de incendios. De manera simultánea, el humo comenzó a salir al exterior del edificio. Fue visto por los vecinos de la zona, que dieron la voz de alarma y no dudaron en bajar a la calle para ayudar en lo que fuera necesario.

Precisamente a la hora de la humareda se producía el cambio de turno en la residencia, por lo que en esos momentos se encontraba el doble de personal de lo habitual, tanto los que salían de tarde como los que entraban de noche. Todos ellos, ayudados por los vecinos, se encargaron de la evacuación de los casi un centenar de residentes, que estaban acostados en sus habitaciones. Los protocolos de evacuación con los que cuenta el centro residencial funcionaron a la perfección y en pocos minutos todos los mayores se encontraban en el exterior del edificio.

Los vecinos de la zona, además de ayudar en la coordinación de la evacuación de los residentes, no dudaron en acercar mantas para arroparlos. También plásticos y paraguas para proteger a los usuarios, ya que durante los minutos posteriores la lluvia hizo acto de presencia en la localidad, como también lo hizo en el momento en el que se decidió el regreso de los mayores al interior del centro.

Hasta el lugar se desplazaron hasta cuatro dotaciones de bomberos, tanto de la Diputación de Valladolid, como de Segovia, además de los voluntarios de la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar. También varias ambulancias, en previsión de posibles afectados por inhalación de humo, aunque finalmente no hicieron falta. Además, también acudió la Policía Local de Cuéllar y varias patrullas de la Guardia Civil. Todos ellos coordinaron un centro de mando. Durante prácticamente una hora se revisaron las instalaciones y se atendió a cuantas personas fue necesario, pues algunos familiares llegaron al lugar en un visible estado de nervios.

Tras aproximadamente una hora en el exterior y una vez revisadas las instalaciones, se comprobó que no existía ningún peligro y los residentes fueron accediendo al interior del Centro de Mayores Valdihuertos, ayudados por los trabajadores, regresando poco a poco a sus habitaciones.

Pasada la medianoche, la dirección de la residencia informó de que la situación se encontraba totalmente controlada, todos los residentes en perfecto estado y no había habido ningún herido. También agradecieron a todos los vecinos de Cuéllar que se habían acercado a colaborar, así como a los trabajadores del centro que, con profesionalidad, llevaron a cabo la evacuación, acompañamiento y posterior acostada de los residentes.

Por último, agradecieron la paciencia y colaboración de las familias, así como la actuación de los bomberos, la Guardia Civil, Policía Local y sanitarios por su ayuda. Los familiares, a través de las redes sociales, también subrayaron la profesionalidad de los trabajadores del centro y realizaron un reconocimiento a la labor de ayuda prestada por los vecinos.