Santo Tomás y El Salvador, los barrios de Segovia donde más se teletrabaja
La elevada presencialidad que requieren algunas profesiones repercute en una mayor dependencia a la movilidad laboral
La pandemia revolucionó los métodos de trabajo de los segovianos. La modalidad telemática se extendió por multitud de empresas y sectores, pero no toda la ... población ha tenido la misma capacidad para adaptarse a los nuevos hábitos. La mayoría de los residentes en la provincia presenta serias dificultades para teletrabajar, ya sea por la presencialidad que exige su labor o por el exceso de movilidad que caracteriza a Segovia. Precisamente, es uno de los territorios con menos presencia de empleo tecnológico a escala nacional, aunque la tendencia de personas dedicadas a este gremio es ascendente.
Han pasado más de cinco años desde la llegada del coronavirus, que supuso un antes y un después en muchas esferas de la vida de los segovianos. Una de ellas es la referente a los hábitos laborales. La extensión del teletrabajo en aquellos casos en los que ha sido posible ha llevado a muchas personas a replantearse su lugar de residencia habitual, lo que impulsó el retorno de algunos ciudadanos que se habían marchado a otras provincias; e incluso su pertenencia a un sector económico en concreto. En este sentido, no sorprende el repunte que ha experimentado el gremio tecnológico.
La Fundación Cotec, organización que promueve la innovación, analiza en su atlas de vulnerabilidad urbana y social la capacidad de los residentes en determinados municipios para adaptarse al teletrabajo, modelo que contempla la prestación de un mínimo del 30% de la jornada de forma telemática. Todo ello para evaluar las posibles desigualdades que pueden surgir entre las diferentes localidades debido a la alta presencialidad de algunas profesiones. En Segovia, el freno a la modalidad telemática es mucho mayor en relación a la Comunidad de Madrid, pero inferior respecto al medio rural de provincias aledañas, como son Valladolid, Burgos, Palencia o Soria.
A día de hoy, el 66% de los segovianos tiene serias dificultades para teletrabajar. Es la mayoría de la población, aunque es una proporción que fluctúa según las comarcas. El entorno que más inconvenientes registra a la hora de adaptarse a esta modalidad laboral es el de Navas de Oro, donde el 82% de la población no tiene capacidad para hacer uso de métodos telemáticos en el trabajo. Está seguida de Navalmanzano y sus alrededores, con el 79%, además de Coca, Cuéllar, Nava de la Asunción, Olombrada y sus municipios más próximos.
Estos puntos del mapa provincial se caracterizan por compartir una serie de obstáculos a la hora de reducir la movilidad que está ligada al trabajo. La entidad que se ha encargado de realizar el estudio hace hincapié en la alta presencialidad que requieren algunos sectores económicos, los cuales predominan en las anteriores localidades citadas, como son el primario y terciario.
Por zonas
En el caso de la comarca de Navas de Oro, el 26% de los habitantes se dedica a la agricultura y ganadería; el 18%, al comercio o reparación de vehículos; y el 16%, a la industria manufacturera. También sobresale la hostelería, la construcción y las actividades sanitarias, cuyas tareas son muy difíciles de adaptar al formato telemático. Por lo general, el norte del territorio provincial cuenta con una menor capacidad para incorporar el teletrabajo, pues sobresalen las actividades agrarias, turísticas y de transporte.
Esta particularidad se puso especialmente de manifiesto durante los meses de confinamiento por la covid, cuando el trabajo a distancia se hizo extensivo. Sin embargo, estos municipios segovianos fueron escenario entonces de continuos desplazamientos, incluso cuando el medio rural cuenta con un menor grado de accesibilidad al transporte público. El cruce de ambas circunstancias arroja diferencias según la zona de la provincia.
La más cercana a la sierra y a la Comunidad de Madrid ha sabido afianzar el teletrabajo con el paso de los años, de ahí la proliferación de centros 'coworking', promovidos por Segovia Sur, que permiten a los interesados completar sus tareas en un espacio de trabajo colaborativo. Esto no solo ha permitido atraer talento de particulares a los pueblos, sino de pequeñas empresas que hacen uso de estos locales por un bajo precio.
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Los habitantes de El Espinar y pueblos aledaños tienen facilidad para desarrollar sus tareas desde casa, lo que ha supuesto a su vez un empuje al padrón municipal y, a su vez, a la población flotante que llega durante el verano. La mitad de los residentes en esta área de Segovia están especializados en actividades que se prestan a la modalidad telemática, como son las administrativas, profesionales, científicas, técnicas, artísticas o recreativas. A juicio de la Fundación Cotec, el cambio hacia un modelo urbano de baja movilidad «puede exacerbar las posibles desigualdades que se deriva de la alta presencialidad de algunas profesiones». Mientras que las salidas de trabajadores en la ciudad se han reducido en la actualidad hasta un 80% en comparación con el periodo prepandemia, en el medio rural han descendido un 40%.
La propia capital segoviana arroja diferencias según el barrio. Santo Tomás, Santa Eulalia y El Salvador, así como el recinto amurallado, se prestan más a las labores que pueden compaginarse con el teletrabajo. Cerca del 60% de los vecinos en estos distritos llevan a cabo su labor cotidiana desde casa, ya que muchos de ellos se adscriben al sector público, financiero o administrativa. Por el contrario, en Nueva Segovia, Comunidad de Ciudad y Tierra, San Lorenzo y los barrios incorporados registran una mayor presencialidad. Sobresalen en estos entornos residenciales las personas dedicadas a la hostelería, comercio y construcción.
En auge
Una encuesta elaborada por la Federación Empresarial Segoviana (Fes) hace dos años reflejó que tan solo una de cada tres empresas segovianas permitía el teletrabajo. El resto no aplicaba este sistema en el desarrollo de su actividad diaria, lo que va aparejado al uso de herramientas digitales en el tejido productivo local. El sindicato CC OO apenas tiene constancia de la inclusión de regulaciones sobre el teletrabajo en los convenios firmados en el periodo más reciente en la provincia.
Aun así, todo apunta a que la presencia de las tecnologías en las diferentes profesiones está en auge, especialmente en las ciudades. Tan solo hay que echar un vistazo al último informe de empleo elaborado por Cotec, que analiza la evolución de los afiliados a actividades con uso intensivo de las tecnologías.
El peso de este sector ha aumentado ligeramente en la provincia: cerca de un 0,5% en los últimos cinco años. No obstante, ha lamentado un bache a lo largo de 2024 a raíz de la pérdida de más de medio centenar de cotizantes respecto a 2023. La organización encargada de realizar el estudio observa una «correlación evidente» entre el impulso de oficios basados en las nuevas tecnologías y el nivel de renta de los habitantes. Cuanto más elevados son los ingresos, más empleo tecnológico custodia un territorio.
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