San Quirce rinde un sentido homenaje al arquitecto José Miguel Merino de Cáceres

La Real Academia de Historia y Arte de San Quirce ha celebrado un entrañable homenaje al arquitecto segoviano José Miguel Merino de Cáceres, académico supernumerario fallecido el pasado 9 de septiembre a los ochenta y un años. La sesión necrológica, presidida por el director de la Academia, Pablo Zamarrón, contó con las intervenciones de tres compañeros y amigos, los también académicos José Antonio Ruiz Hernando, Rafael Cantalejo San Frutos y Fernando Vela Cossío.

José Antonio Ruiz Hernando enumeró algunas de las restauraciones que el arquitecto realizó en Segovia, entre ellas en la iglesia de San Miguel, en la capilla del Sagrario de la Catedral, en San Frutos del Duratón o en el Monasterio del Parral. Por su parte, Rafael Cantalejo centró parte de su exposición en la labor que Merino de Cáceres desarrolló en el Alcázar de Segovia, lo que le valió el nombramiento como Maestro Mayor de la fortaleza.

Fernando Vela Cossío, catedrático de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid, recordó a José Miguel Merino de Cáceres como investigador y profesor de Historia de la Arquitectura, pues sus contribuciones al estudio de dos disciplinas muy relacionadas con ese ámbito, la metrología y la historia del expolio de los monumentos, han hecho de él «una referencia importantísima».

Nancy Barnes, viuda de José Miguel Merino de Cáceres, cerró, emocionada, la sesión necrológica. «Aprendí mucho a su lado, porque yo no sabía mirar los monumentos y él me transmitió toda su sabiduría para hacerlo. José Miguel me enseñó a mirar, a contemplar el patrimonio. Me abrió los ojos para ver lo bueno y también lo malo».

• Temas
• Segovia (Provincia)