La reforma y el proyecto museístico del Palacio Episcopal cuestan 1,2 millones

La recuperación del Palacio Episcopal como espacio cultural de primer orden y polo de atracción turística es inminente. La Diócesis de Segovia ha apostado con fuerza por este proyecto de rehabilitación de este histórico edificio situado en la plaza de San Esteban, en pleno casco antiguo de la capital. Prueba de esa voluntad del estamento eclesiástico por resucitar el inmueble tras el fiasco hostelero precedente es la inversión que ha llevado a cabo, con ayuda de la Junta de Castilla y León. Las obras ya ejecutadas de arreglo y recuperación de estructuras deterioradas del palacete han costado en torno a 850.000 euros, según ha revelado el vicario general de la diócesis, Ángel Galindo, quien matiza que la Administración regional ha contribuido a estos trabajos con una asignación de 125.000 euros.

A ese desembolso, el representante del clero añade otros 400.000 euros más, que es el presupuesto que ha gestionado la Iglesia segoviana para la «puesta a punto» del proyecto expositivo que está a punto de irrumpir en la oferta cultural de la ciudad. Se trata del Museo de la Orfebrería Religiosa, que abrirá sus puertas antes de Semana Santa, como ha manifestado el delegado de Patrimonio de la Diócesis de Segovia, Miguel Ángel Barbado.

En cuanto a los flecos que quedar por recortar, el representante del clero concretó que a día de hoy se están llevando a cabo tareas de limpieza y se está finalizando la cobertura del techo de alguna sala. Además, hay una tercera fase pendiente de desarrollo, que es el acondicionamiento de la parte trasera del jardín del Palacio Episcopal. «La parte selvática ya se ha limpiado», ha apostillado el vicario general. Esta puesta a punto del edificio finalizará en verano, calcula Galindo.

La rehabilitación arquitectónica del inmueble; la puesta en marcha del Museo de la Orfebrería Religiosa, cuya exposición será «única porque nunca se ha visto algo así en España de aunar arte y catequesis», ensalza Barbado, y la colección del museo episcopal que ya existía con anterioridad y a la que se han incorporado nuevas piezas conforman esa apuesta cultural y turística de la diócesis, que se complementa con la apertura de cuatro templos para su admiración y contemplación, que son los de San Justo y Pastor, San Millán, San Martín y San Miguel.

En cuanto al Museo de la Orfebrería Religiosa, habrá una colección permanente de obras, muchas han requerido trabajos de restauración; y también contará con un depósito de piezas procedentes de distintos puntos de la provincia para su recuperación y conservación. La idea es que este proyecto sea «vivo», por lo que la intención es que se sucedan muestras temporales, según ha agregado el vicario general.