Un préstamo de 1.700 euros y nueve sesiones sin consumir
Mariana Deaconescu se enteró del cierre del Centro Único de Segovia cuando acudió a realizar la segunda de sus diez sesiones pagadas
Mariana Deaconescu no olvida el 29 de febrero. Y no porque el día solamente ocurra una vez cada cuatro años. Contrató aquel día un bono ... de láser para el cuerpo entero de diez sesiones a 99 euros cada una. Como no tenía trabajo, le pidió a su madre que le financiara. Solamente se ha dado una sesión de cuerpo completo y dos faciales, pero Cofidis no ha suspendido sus cuotas –ya ha pagado cinco– y ella está inmersa en un complejo proceso para recuperar su dinero o sus sesiones, una pérdida que con las comisiones del préstamo llega a los 1.700 euros.
La financiación la tramitaba el propio centro. Cada mes y medio, ella se hacía el cuerpo completo, pero solo tuvo tiempo a una terapia, en abril. «Siempre lo veía abierto. Conocía a clientes y amigas que se lo hicieron desde hace años y estaban muy contentas. Así que me atreví a hacerlo, pero no ha salido nada bien». La cita para la siguiente sesión era el 15 de julio, tres días después del cierre. Su padre se lo encontró cerrado cuando fue durante el fin de semana a hacer la compra. «Me extrañaba porque nadie había avisado nada. Y así me lo encuentro cuando voy yo el lunes a las cinco de la tarde, a hacerme tranquilamente mi sesión, como si nada».
Ahí empieza la búsqueda de información de Mariana, de 21 años. Primero, llamó al teléfono de Centros Único, sin respuesta. El centro comercial tampoco aclaró más. «Me voy con todas las dudas y dolor de cabeza». Y con los 87,03 euros al mes que le cobra Cofidis. «Llevo desde julio llamando, haciendo reclamaciones, y no me hacen caso». Simplemente busca una dirección para «poder enviar un burofax o algo». La depilación facial se la hace en otro centro. «Pero ya no me he cogido nada de bonos. Voy y pago».
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