La piscina cubierta de Segovia sufre un apagón que la obliga a cerrar varias horas

El malestar se repite entre los usuarios, hartos de la frecuencia de fallos y averías. No había pasado ni una semana de la anterior queja a raíz del «inmenso frío» que aseguran soportar los participantes en el curso de rehabilitación cuando otro percance ha trastocado la actividad. A media mañana, «el suministro eléctrico se quedó sin corriente, lo que propició el parón de las calderas hasta que se volvió a reconectar». La incidencia hizo que la temperatura bajara «drásticamente», por lo que se decidió cerrar al mediodía y así continuó durante la tarde al considerar que no se daba la climatización adecuada.

La concejala subraya que «la caldera funciona bien». Este nuevo fallo ha sido, una vez más, «sobrevenido por una cuestión ajena» a la concesionaria y al Ayuntamiento, a pesar de las reiteradas quejas que le llegan por las averías que temporalmente inutilizan la piscina. El apagón de este miércoles forma parte de «los imponderables» que aquejan a una instalación «complicada» de gestionar como es la cubierta José Carlos Casado. «Los trabajadores hacen un enorme esfuerzo» para que todo funcione, destaca la edil.

Rueda matiza que el mayor quebradero de cabeza es la climatizadora y no tanto el vaso. Este viernes, por ejemplo, el agua estaba a 26,8 grados. Se intenta que no se superen los 27º para no perjudicar a los nadadores. La temperatura ambiente suele estar por debajo de lo deseable. Los 21º no son apropiados por la diferencia excesiva que hay entre la temperatura del agua y la del exterior.

La concejala declara que este problema puede estar cercano a la solución. Rueda señala la «posibilidad de que la semana que viene» estén las dos piezas que hay que instalar en la climatizadora para que preste el servicio deseado.