El Hospital de Segovia consolida la estabilización de las esperas quirúrgicas de antes de la covid

Este retraso extraído de las distintas especialidades del Hospital General Universitario, el único de referencia en la provincia, está más cercano a las dilaciones que se daban antes de la pandemia. Son tardanzas previas a la covid-19 y a cómo condicionó la vida cotidiana al desatar la doble crisis sanitaria y económica en la que sumió a la sociedad. Las reducciones en las listas de espera quirúrgicas que se habían logrado en los ejercicios precedentes a las oleadas de infecciones, en buena medida gracias a la puesta en marcha del denominado Plan Perycles, saltaron por los aires a consecuencia de la expansión mortal del coronavirus.

El mes y dieciséis días que alargan los segovianos su paso por el quirófano es el mismo retardo que había justo hace seis años, al finalizar el segundo trimestre de 2019, cuando ni siquiera se sospechaba la pandemia que se avecinaba. En cuanto a la cantidad de cirugías en cartera, el complejo asistencial acumulaba entonces 1.215 intervenciones quirúrgicas pendientes, una cifra algo inferior a la que se registraba al cabo del último mes de junio. En concreto, 38 menos.

Todos estos datos extraídos de las estadísticas de la Junta, recopiladas y difundidas en el portal en Internet Salud Castilla y León, dan cuenta de que la cadena que conforman las consultas atendidas por los especialistas para tratar las dolencias de los ciudadanos, las pruebas que se hacen para establecer los diagnósticos y los tratamientos que se administran y que a veces pasan por los quirófanos del centro hospitalario, funciona como antes de la pandemia del coronavirus. Ya sí, los datos de la Consejería de Sanidad parecen consolidar la normalización postcovid en la gestión de las listas de espera para someterse a una operación.

Para ello, la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Segovia ha contado con el trabajo sacrificado de los profesionales, como ha aplaudido en reiteradas ocasiones su responsable, Luis Gómez de Montes, defensor también de la colaboración entre el sistema público de salud y el sector privado a través de la firma de conciertos, de inversiones de la Gerencia Regional de Salud para contratar procesos y pruebas diagnósticas y de las conocidas como peonadas retribuidas para los equipos que las realizan.

Para aligerar las listas de espera quirúrgicas, no solo en la provincia segoviana sino en toda la comunidad autónoma, una de las directrices que lanzó la Administración regional fue trabajar más. En concreto, alargar las jornadas y hacer turnos de tarde cuando antes no se realizaban, salvo excepciones como la unidad de Radiodiagnóstico del Hospital General de Segovia, que se anticipó al citar incluso los fines de semana. Es la autoconcertación voluntaria retribuida.