El vallisoletano Fernando del Valle 'Chumi', corneado en el primer encierro de Cuéllar
El experimentado corredor, natural de Boecillo, fue alcanzado en la mano en la calle Parras y ha sido intervenido en la enfermería de la plaza y después trasladado a un hospital de Valladolid
El experimentado corredor de encierros vallisoletano Fernando del Valle, natural de Boecillo, ha resultado herido esta mañana en el primero de los encierros de Cuéllar al ser embestido. Del Valle ha sido alcanzado en la mano mientras realizaba su carrera en la calle Parras, donde ha sido alcanzado por uno de los toros, que lo ha levantado hacia arriba con la cabeza. En ese momento, 'Chumi' ha puesto su mano en la zona inguinal, tratando de salvar la arteria femoral, lo que ha conseguido, si bien el cuerno le ha herido en la mano. El corredor se ha acercado por su propio pie a una de las ambulancias situadas en el recorrido del encierro, donde se le han realizado una primera cura, para trasladarle después a la enfermería del coso taurino, donde ha sido operado, para después ser derivado a un centro hospitalario de Valladolid «para la realización de una placa con la que certificar que todo estuviera correcto», según ha explicado el alcalde de la villa, Carlos Fraile.
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El parte de la enfermería de la plaza de toros, según detalla el alcalde, ha dejado cuatro personas trasladadas a distintos centros hospitalarios, uno de ellos por asta de toro, Fernando del Valle, y tres por contusiones de distinto carácter, tras ser atendidos en los distintos puntos de ambulancias o en la enfermería de la plaza de toros. Los otros tres trasladados a centros hospitalarios tienen golpes, contusiones y fracturas de distinta consideración. Uno de ellos ha sufrido un golpe en la mandíbula, otro un traumatismo craneal y lumbar menos grave y un tercero un traumatismo costal.
Protagonizado por las reses de Cebada Gago, los toros han realizado una carrera peligrosa y rápida ya desde el inicio, en los corrales, donde se produjo el primero de los incidentes. Una de las reses se desvió hacia la izquierda, en una zona donde se coloca el público, aunque regresó rápidamente junto al resto de la manada.
El trayecto por el pinar y el cruce de la carretera de Cantalejo fue también muy rápido y los jinetes intentaron sujetar la manada en lo alto del Embudo. Pero el descenso comenzó con unos minutos de antelación, por lo que el encierro entraba en las calles de la localidad antes de lo previsto, con los toros dispersos. Uno de ellos no llegó a completar el recorrido y poco después de entrar en las calles, en la avenida Camilo José Cela, cayó desplomado y falleció.
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