Segovia

Desarticulado el grupo criminal que asaltó una perfumería de Cuéllar

Las Unidades Orgánicas de Policía Judicial de Soria y Madrid, el área de Investigación del Puesto Principal de Navalcarnero, conjuntamente con el Grupo XXI de la Brigada de Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía de Madrid, han desarticulado un grupo criminal dedicado a robos con fuerza en establecimientos del territorio nacional, entre ellos uno en la provincia de Segovia.

Las investigaciones se iniciaron en septiembre de 2024, cuando se produjeron dos robos con fuerza en un mismo estanco en la localidad soriana de Arcos de Jalón. Los autores de los robos utilizaron vehículos de alta gama y gran cilindrada que previamente habían sustraído para llevar a cabo los referidos robos en los que, tras forzar la persiana metálica del establecimiento, sustrajeron tabaco por un valor total de 24.000 euros.

Así, y tras la práctica de las primeras pesquisas policiales, se concretó que los robos investigados habían sido cometidos por miembros de un mismo grupo criminal asentado en el sur de Madrid y que operaba en todo el territorio nacional cometiendo robos en establecimientos públicos fuera de las horas de apertura, y cuyos miembros utilizaban vehículos de alta gama que previamente habían sustraídos, a los que les colocaban placas de matrícula falsas para llevar a cabo los robos.

En unas ocasiones forzaban los accesos y en otras recurrían al método de 'alunizaje, es decir, estrellaban un vehículo en la puerta o escaparate del establecimiento para posteriormente acceder al interior del mismo y sustraer mercancías o dinero. Así consiguieron acceder al interior de una perfumería de Cuéllar el pasado 25 de febrero de madrugada. El coche, que había sido robado previamente en una urbanización cercana, fue abandonado tras el asalto a la perfumería, de la que se llevaron productos y el dinero de la caja registradora.

Además, se determinó la estabilidad del grupo criminal y la especialización de los miembros del mismo. No solo tomaban fuertes medidas de seguridad tanto en las acciones preparatorias de los robos como en la ejecución de los mismos, sino que, además, se caracterizaban por el uso de extintores para enmascarar sus huidas en caso de ser detectados, siendo esta una práctica habitual en sus robos.

De igual modo se puso de manifiesto el carácter huidizo y peligroso de estos delincuentes. Tras perpetrar un robo en un establecimiento en la localidad madrileña de Majadahonda y tras ser descubiertos por una patrulla de la Policía Local, protagonizaron una huida en la que en primer lugar vaciaron un extintor para dificultar la visión de los agentes de la policía y posteriormente envistieron al vehículo policial. A continuación iniciaron una fuga a gran velocidad y con maniobras de conducción temerarias que finalizó con un accidente, del cual fue detenido el conductor y miembros del grupo, quien sufrió heridas graves a consecuencia del siniestro, logrando huir el resto de miembros.

Si bien, el objetivo mayoritario de estos delincuentes era la sustracción de mercancía en establecimientos de venta de labores de tabaco (estancos), sus acciones delictivas no se limitaban únicamente a este tipo de establecimientos. La investigación puso de manifiesto cómo este grupo cometió robos en bares, restaurantes, tiendas de bicicletas y perfumerías.

Se les atribuye un total de diez robos con fuerza, dos en estanco de Arcos de Jalón, dos en estanco de Cebreros (Ávila), dos en estanco de Villanueva de Alcardete (Toledo), un robo en bar de Majadahonda, un robo en bar de Navalmoral de la Mata (Cáceres), un robo en una tienda de bicicletas de Onzonilla (León) y el robo en una perfumería de Cuéllar. Todos ellos realizados a través de la sustracción de doce vehículos, los cuales han sido recuperados a través de todo el territorio nacional.

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