Concluye la ampliación del puente sobre el río Eresma en la carretera CL-607

Durante algo más de siete meses, los conductores que habitualmente circulan por la carretera CL-607 han tenido que convivir con las molestias de las obras que desde el pasado verano se acometen en el puente sobre el río Eresma de la carretera que une la salida de Segovia desde la Fuencisla con la carretera de Arévalo (CL-605). Unas molestias que, si se cumplen las previsiones del Servicio Territorial de Fomento, tan solo se prolongarán varias semanas más, una vez ha terminado la parte más laboriosa de una intervención que pretende ensanchar el puente y así aumentar la seguridad en la zona.

Esta semana, los trabajadores de la empresa Ecoasfalt tienen previsto concluir la parte de mayor complicación de la intervención, con la finalización de la nueva estructura del puente y la renovación del firme. Para ello, durante las dos últimas jornadas han tenido que cortar puntualmente el tráfico en la zona con el objetivo de ejecutar las tareas de fresado de firme y el extendido de la capa de rodadura de mezcla bituminosa en el puente. Durante estos dos días, el tráfico se ha desviado desde el cruce de San Pedro Abanto y desde la CL-605.

Una vez ha concluido la parte 'constructiva' del puente y se ha completado la renovación del firme, los últimos trabajos pendientes consisten en el pintado de las marcas viales sobre la nueva calzada, la nueva señalización y cartelería en la zona y el vallado necesario en algún punto del tramo situado junto al río Eresma y en las proximidades del centro ecuestre de Castilla y León.

Pese a que el grueso de la obra está terminada, el Servicio Territorial de Fomento mantiene su previsión de finalizar los trabajos durante la primavera de este año, puesto que el pintado todavía puede retrasarse si las condiciones meteorológicas durante los próximos días no son las adecuadas.

La intervención comenzó el pasado 15 de julio aunque desde finales de 2019 ya se empezó a limpiar la zona para poder iniciar los trabajos. Los trabajos, ya en su recta final, persiguen mejorar la seguridad vial en este tramo de concentración de accidentes de la CL-607, que presentaba una sección transversal insuficiente, dado que existía un estrechamiento de la calzada que en el puente quedaba reducida a un solo carril de cinco metros de ancho para el tránsito de vehículos. Esta vía, que pertenece a la red básica de carreteras de la Junta de Castilla y León, sirve de enlace entre la autovía de Valladolid y la carretera de Arévalo y bordea la ciudad de Segovia, con una Intensidad Media de Vehículos (IMD) de 4.374 vehículos al día.

El proyecto ha contado con un presupuesto de 348.238 euros y ha permitido ensanchar el ancho en este tramo hasta los 13,10 metros, de modo que se pasa de un solo carril de tránsito para vehículos a dos carriles, así como sus respectivos arcenes y aceras necesarias para el paso peatonal en mejores condiciones.

También se ha incluido en la obra la mejora del drenaje con cunetas de desmonte, además de la construcción de pasos salva cunetas, así como bordillos y bajantes prefabricadas en terraplén. Las obras se completan con la protección de escolleras en ambas márgenes de la carretera y la señalización horizontal y vertical, entre otras actuaciones.

Ha sido necesario la construcción de una nueva estructura que se adapta a la geometría del puente, de manera que mediante arcos de hormigón armado se ajusta la forma a los arcos de piedra del puente antiguo y con un acabado de piedra similar al existente. También se ha previsto la protección frente a avenidas extraordinarias del río Eresma con escolleras que cubran la zona de estribos y pilas.