El falso anuncio para engañar a los estudiantes que hacen cola para acceder a la sala de San José

La historia se repite cada enero, mayo y junio. Con la llegada de las épocas de exámenes las salas de estudio de la ciudad se quedan pequeñas ante la avalancha de personas dispuestas a preparar en su interior los exámenes finales en los que se jugarán buena parte del trabajo realizado durante varios meses. Estudiantes de Educación Secundaria, de Bachillerato (entre ellos los que se enfrentarán la próxima semana a la EBAU), de educación universitaria u opositores conviven durante estas semanas durante horas en torno a una mesa llena de apuntes, bolígrafos y rotuladores subrayadores.

Acudir a las salas de estudio o bibliotecas es la fórmula escogida por cientos de estudiantes de la ciudad que prefieren su tranquilidad y silencio (al menos esa es la teoría) a las posibles distracciones que puedan encontrar en sus casas, donde la televisión, el ordenador, la presencia de familiares rondando o la de un frigorífico a escasos metros son tentaciones recurrentes que amenazan con desviar la mirada de los apuntes y perder tiempo de estudio.

En Segovia, son varios los espacios que ofrecen a los estudiantes la posibilidad de estudiar en un ambiente más propicio a la concentración. La biblioteca del campus María Zambrano es uno de los lugares favoritos de los universitarios de la Uva, aunque de ella no pueden hacer uso el resto de estudiantes de la ciudad. Para todo el que quiera está disponible la sala de estudio de la Biblioteca Pública de Segovia, en el barrio Comunidad Ciudad y Tierra. Con 96 plazas, el centro titularidad de la Junta de Castilla y León abre de nueve de la mañana a nueve de la noche de lunes a viernes (y de nueve a dos de la tarde los sábados). «Ahora mismo es la mejor. Es algo más pequeña que la de San José pero el ambiente de estudio es mejor», afirma un universitario que a diario acude a la Biblioteca Pública y los fines de semana al Centro Cultural de San José.

De titularidad municipal son la sala de estudios de La Albuera, que abre de lunes a domingo de 9:00 a 14:00 y 16:00 a 21:00 y con 50 plazas disponibles; la sala de San Lorenzo, con un centenar de plazas y un horario de 8:00 a 14:30 y de 16:00 a 21:00 de lunes a viernes y de 9:00 a 14:00 y de 16:00 a 21:00 los fines de semana; y la Casa de la Lectura, en el casco histórico, con 24 plazas de jueves a sábado de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas (los domingos también abre la mañana).

Sin embargo, la preferida por los segovianos, y también la que cuenta con más capacidad es la sala de estudio del Centro Cultural de San José. Con 160 plazas disponibles, también abre de lunes a domingo y es la única de la ciudad que, durante la época de exámenes (del 13 de mayo al 21 de junio), permite a los estudiantes acudir de madrugada, de 22:00 a 4:00 horas. Precisamente, este hecho ha motivado que las colas para acceder a la sala de estudio, habituales minutos antes de las 16:00 horas para acceder en el horario de tarde, sean especialmente largas por la noche.

Según explica una de las usuarias de la sala en horario nocturno, durante los últimos días ya había gente esperando para coger sitio hasta una hora antes de la apertura de la sala, a pesar de que a las nueve de la noche (momento en el que se empieza formar la fila de personas a las puertas del Centro Cultural), todavía permanece abierta en horario de tarde (cierra a las 21:30 horas, momento en el que tienen que abandonar el espacio todos los usuarios).

Es tal la espera que tienen que realizar los usuarios que varios ya se dan por vencidos. Renuncian a entrar en la sala, invierten el tiempo de espera en el estudio e hincan codos en sus viviendas. Pero otros, sin embargo, parece que han optado por la picaresca para intentar aliviar el exceso de demanda de la sala en horario nocturno.

Este martes, las puertas de acceso al Centro Cultural de San José han amanecido con un cartel en el que se informaba de la apertura, del 28 de mayo al 9 de junio, de «la sala de estudio de la biblioteca municipal de Nueva Segovia» con el objetivo de solucionar «la elevada cantidad de gente que está viniendo a la sala de estudio de San José en el horario nocturno». El cartel, que se puede observar en la fotografía que acompaña este texto, no ha sido colocado por ningún trabajador del centro cultural, quienes se mostraron sorprendidos cuando encontraron el aviso.

Tampoco se ha producido ningún anuncio oficial por parte del Ayuntamiento de Segovia o de la Junta de Castilla y León de la apertura especial, en horario nocturno, de la Biblioteca Pública de Segovia. Su director, Roberto García, niega la apertura más allá de las nueve de la noche del centro y asegura no haber recibido ninguna noticia al respecto.

Así, todo hace indicar que el cartel colocado en las puertas de acceso al centro cultural ha sido una broma o un intento de confundir a los usuarios de la sala de estudio de San José con el objetivo de intentar evitar las habituales colas durante los últimos días. En el anuncio, además del logotipo del Ayuntamiento de Segovia, se aprecian varios fallos que delatan su falsedad. Además de faltas de ortografía, se indica que la sala de estudio de la Biblioteca Pública es municipal, cuando es de competencia de la Junta de Castilla y León, y se localiza su ubicación en el barrio de Nueva Segovia, cuando se encuentra en el de Comunidad Ciudad y Tierra.