El Ayuntamiento volverá a intentar la municipalización del 'parking' de Ezequiel González

Lo que sí tiene decidido el equipo de gobierno es el modelo de gestión que quiere para el aparcamiento situado en los bajos de la estación de autobuses, con salida y entrada al paseo de Ezequiel González. Será una explotación municipal, directa, como la implantada para el aparcamiento subterráneo de José Zorrilla, en palabras de García Zamora. «El Ezequiel González seguirá siendo un aparcamiento, pero el servicio que se va a prestar será completamente diferente, pues estará todo automatizado, como el de la estación Guiomar, por ejemplo, que tiene las máquinas expendedoras y los brazos que se abren y cierran», explica el concejal. Esta automatización hace prescindible la contratación de personal (una de las polémicas que conllevó el cierre fue la pérdida del empleo de las seis trabajadoras que la anterior concesionaria tenía), pero el Ayuntamiento entiende que es el modelo de gestión más adecuado y extendido en los aparcamientos de nuevo uso.

La única parte que el Ayuntamiento tendrá que externalizar es la correspondiente al mantenimiento de la maquinaria. «No tiene mucho sentido que ese mantenimiento lo hagamos desde el propio Ayuntamiento porque requiere una especialización que no tenemos. No obstante, en el departamento de Tráfico y Movilidad le están dando una vuelta y posiblemente se opte por externalizar ese servicio concreto. Para el resto de la gestión, no se requerirá empleados», apunta el portavoz municipal socialista.

El equipo de gobierno, integrado por los grupos PSOE e Izquierda Unida, tiene claro desde hace meses que el futuro del aparcamiento de Ezequiel González pasa por la municipalización del servicio, después de años de gestión en manos de una empresa concesionaria. Pero el voto contrario de Podemos-Equo en el pleno donde se abordó la cuestión arruinó, momentáneamente, sus pretensiones. Podemos sospechaba que, en el fondo de la pretendida municipalización, subyacía la intención de prescindir de los puestos de trabajo que el aparcamiento tenía. El cierre, como se recordará, tuvo tintes traumáticos porque afectó de manera muy directa a seis personas, las seis empleadas que atendían el 'parking' desde hacía años. La extinción del contrato entre el Ayuntamiento y la concesionaria dejó a las trabajadoras en situación de ERTE y a cerca de sesenta abonados y alquilados sin lugar para aparcar sus vehículos.

«Las tres últimas horas han sido muy duras. Todavía quedaba algún coche y la gente venía triste a por ellos. He sentido una sensación muy rara al ver el 'parking' vacío, de 'hasta aquí hemos llegado'», decía Lidia Vélez, una de las seis trabajadoras afectadas. Las empleadas, dependientes de la concesionaria, no entendían una decisión que iba a dejarlas en la calle. «Es un servicio que se ha estado llevando bien y ahora no saben qué va a pasar con el aparcamiento», decían, y denunciaban la «frialdad y avaricia» que estaba demostrando el Ayuntamiento: «Les da igual el trabajo que genera esto. También los abonados, que llevaban aquí años».

Con motivo del cierre, los concejales de Hacienda, Jesús García Zamora, y Tráfico, Jesús Sanz Cobos, mantuvieron una reunión con usuarios y arrendatarios del servicio para exponerles las alternativas que tenían para estacionar sus vehículos. El Ayuntamiento expresó en aquel encuentro su intención de tener de nuevo el aparcamiento operativo en un plazo de dos a cinco meses.

Desde entonces, el equipo de gobierno ha ido avanzando en el modelo de gestión, y aunque tiene marcado en rojo el primer trimestre de 2021, todo dependerá de los plazos para la licitación y posterior adjudicación de las máquinas, imprescindibles para que el servicio, tan necesario para la movilidad y la descongestión del tráfico en la zona, pueda volver a funcionar.