Los vecinos despiden las fiestas

La fiesta de Cantimpalos ha estado acompañada de una serie de actividades paralelas a la celebración religiosa. Así, este año, los espectáculos taurinos han consistido en una novillada con picadores, otra sin picadores y una becerrada popular mixta.

El lunes se desarrolló la novillada sin picadores que tuvo un aforo de tres cuartos de entrada, en una tarde con temperatura agradable a pesar de la amenaza de tormenta. El lote de seis novillos de la ganadería de Valdeolivas (Ávila) era de color tostado chorreados, bien presentados, con trapío y dieron mucho juego, sin embargo, no todos los novilleros se llevaron trofeos por su faena. De hecho, las cuatro únicas orejas, la cortó Miguel Ángel Pacheco, dos en cada uno de su lote. Recibió al primero de sus toros de rodillas y estuvo muy completo con el capote, muleta en mano, provocó encendido interés en el público, pues entre las series fundamentales por la derecha y al natural, intercaló alegres y oportunos remates y en las estocadas, también tuvo suerte

Los otros dos novilleros, Diego Duque y Sedano Vázquez, pusieron interés durante la faena de capote y muleta, pero no tuvieron suerte con la espada y fue necesario utilizar la puntilla e ir al descabello varias veces, por lo que no obtuvieron más que el aplauso del público.

Durante el domingo, lunes y martes, no faltaron encierros urbanos, ecológicos, animadas verbenas, pases de tarde Otro elemento destacado que denota el ambiente festivo, ha sido la música de charanga que ameniza las horas centrales del domingo y el lunes, fiesta de la espuma con castillos hinchables de agua, el vermú juegos y la paella popular el último día de fiesta.