Venta Magullo celebra la fiesta del talento culinario

Óscar Velasco es uno de los jóvenes cocineros españoles con más proyección; el chef del restaurante Santceloni de Madrid posee dos estrellas Michelín, «y pronto tendrá la tercera», según dice su colega y amigo Óscar Calle, que ha contado con él para la fiesta gastronómica de Venta Magullo, Trazos de autor. Las mesas para el evento organizado por Calle y su socio Ángel Peña se agotaron el primer día que el establecimiento segoviano las puso a la venta, y era lógico pues junto a los dos Óscar, Velasco y Calle, el exclusivo menú reúne las propuestas de otros tres reconocidos cocineros: Xoán Crujeiras, del restaurante coruñés A Estación; Miguel Ángel de la Cruz, de La Botica, de Valladolid, y Héctor López, del restaurante España, de Lugo. Y además con la selecta elección entre los mejores vinos europeos realizada por Ángel. Una fiesta culinaria entre amigos y para los amigos.

La propuesta de Venta Magullo da continuidad al Festival de Cocina Joven que inició en 1998, pero es una adaptación a los nuevos tiempos, a los gustos del público, que han cambiado mucho desde entonces, y a la evolución de la gastronomía impulsada por los grandes nombres de la cocina española como Ferrián Adriá y también por jóvenes como los dos Óscar.

Calle y Peña son conscientes de que los programas de televisión también influyen en la clientela, porque después de verlos busca cosas nuevas en los restaurantes, por eso pensaron en este nuevo evento, exclusivo y a la vez «un homenaje» a su clientela más fiel, y decidieron contar con los amigos que tienen dentro de la élite de la gastronomía española. En cuanto Óscar se lo dijo se prestaron y su presencia en Trazos de autor ya es «una muestra de cariño, de confianza, porque lo que hacemos es mostrar su cocina, lo que ellos hacen en sus restaurantes», señala Calle, que aparte de reunirlos solo ha tenido la dificultad de «ponernos de acuerdo los cinco para hacer un menú elaborado y completo, que reúna todo en una comida».

Lo es, sin duda. Son seis platos con seis maridajes de vino, aunque Ángel Peña prefiere hablar de «armonizados» porque la armonía es lo que ha buscado al elegir los caldos que sean el complemento perfecto a los platos para «ofrecer un premio a nuestros clientes».

No hay mejor calificativo. En realidad el menú lo formaron este sábado por la noche siete propuestas, contando con la caballa marinada con notas cítricas que el chef de Venta Magullo preparó como aperitivo de bienvenida. Es nueva cocina española, aunque todos los platos del menú están basados en en la tradición, la calidad del producto y una esmerada elaboración a partir de las que se presentaron texturas y contrastes, pero «sin alquimias porque no pretendemos hacer lo que Ferrán Adriá», comenta Calle, quien subraya que «para nosotros es una fiesta interna y para nuestros clientes un homenaje».

En Venta Magullo, esta fiesta del talento culinario presentó las propuestas de cinco cocineros que llevan a la práctica, como ha dicho en alguna ocasión el segoviano Óscar Velasco, el axioma de que «el triunfo está en uno mismo, en ser feliz». Y también es cierto que la felicidad no es la meta sino el camino, de lo que saben mucho estos chefs y el propio jefe de sala del establecimiento de la carretera de Soria, pues Ángel Peña ha hecho muchos kilómetros para traer siete magníficos vinos españoles y europeos, poco conocidos y a los que el público no está acostumbrado, idóneos para sorprender y para armonizar con ellos cada plato del menú.