La USAL traducirá la biografía sobre Unamuno de la profesora Rudd «extrañamente ignorada por los historiadores»
El rector también anunció en el homenaje en el cementerio la creación de la Cátedra de memoria Histórica que llevará el nombre de Josefina Cuesta
Tras un año sin celebrarse con motivo de la pandemia por la covid, la Asociación Memoria y Justicia recuperó el pasado viernes, 31 de diciembre, ... su homenaje a Miguel de Unamuno en el cementerio San Carlos Borromeo de Salamanca, junta a su lápida.
Un acto en el que el rector de la Universidad de Salamanca aprovechó para dar a conocer que la institución está preparando una cátedra de la Memoria Histórica , que llevará el nombre de Josefina Cuesta, historiadora fallecida este mismo año. Y que también se esta llevando a cabo la traducción de una de las primeras biografías sobre Miguel d e Unamuno, escrita en inglés por la profesora e historiadora norteamericana Margareth Thomas Rudd.
Ras una pieza musical al violín, Luisa Vicente Martín, presidenta de la Asociación Memoria y Justicia de Salamanca, fue la encargada de presentar el acto recordando las facetas por las que podía ser estudiado y valorado Miguel de Unamuno, además de compartir una entrañable anécdota del eterno rector de la Universidad con un niño, al que vio durante uno de sus paseos por las calles de Salamanca. «A finales de octubre de 1936 Unamuno vio a un niño llorar en la plaza de Colón. Se acercó a él y le preguntó qué le pasaba. El niño le dijo que habían matado a su padre y a su hermano en la pared del cementerio. Unamuno no dijo nada, solo se sentó a su lado y esperó hasta que el niño se tranquilizó. Ese día, Unamuno vio la magnitud de la Guerra Civil que acaba de empezar», señaló Luisa Vicente.
Por su parte el rector aseguró que la Universidad, más allá de custodiar y poner en valor el legado entregado por la familia de Unamuno en la Casa Museo del profesor, siempre ha querido indagar y llevar la verdad a la investigación sobre este personaje tan vinculado av la Universidad de Salamanca. Así, anunció que el servicio de publicaciones de la Universidad de Salamanca editará el libro de la profesora Margareth Thomas Rudd, 'El hereje solitario'. Una de las primeras biografías escritas sobre Unamuno «que ha sido ignorada por los historiadores y que es muy reveladora sobre lo que sucedió en los últimos días de la vida de Unamuno» La profesora Rudd lo escribió en los años sesenta y en inglés, y quizás «por eso no ha sido muy utilizado, pero no hay que tenerle miedo a la verdad, a la memoria aunque sea dolorosa hay que recuperarla» señaló Rivero. Además, el rector adelantó que una cátedra de Memoria Democrática llevará el nombre de la profesora Josefina Cuesta, fallecida este año y gran impulsora de la memoria histórica a la que también se recordó este viernes en el cementerio, ya que fue miembro activo de la Asociación Memoria y Justicia de Salamanca.
En el acto también participó Luismi Calvo, el hijo de Luis Calvo Rengel, uno de los impulsores de la asociación organizadora del homenaje y promotor de este homenaje a Miguel de Unamuno junto su tumba, y que recordó como su padres siempre le hablaba del fugaz encuentro que tuvo de niño con Miguel de Unamuno cuando jugada con sus amigos en la calle.
Además, como es habitual, Pablo Unamuno, nieto del eterno rector de la USAL también habló de su abuelo, que como señaló «no fue represaliado, porque era una figura con un prestigio internacional, porque si no hubiera sido así, lo habrían fusilado. En Salamanca no hubo batallas, pero sí fusilamientos, como se puede ver en el memorial que hay en este cementerio», explicó.
También recordó que a partir del 12 de octubre de 1936, su abuelo fue marginado por la Universidad, el Ayuntamiento, el Casino y la sociedad civil salmantina. «Incluso cuando murió, -el 31 de diciembre de 1936- su cadáver fue secuestrado por los falangistas».
Pablo Unamuno sí reconoció que tanto la Universidad, como el propio Ayuntamiento, le acabaron dando el sitio que su abuelo se merece. «Pero lo que más me entusiasma es la cantidad de gente que me cuenta anécdotas sobre mi abuelo, antes los propios protagonistas y ahora sus descendientes. Es una muestra de que la sociedad vuelve a reconocer su valía. Todo el mundo quiere hablar de él» sentenció.
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