Los Sembradores de Estrellas llevan la Navidad a las calles de Ciudad Rodrigo
CIUDAD RODRIGO ·
Organizados por la delegación de Misiones de la diócesis, jóvenes y mayores recorrieron las calles felicitando las fiestasSILVIA G. ROJO
Domingo, 23 de diciembre 2018, 13:36
La Diócesis de Ciudad Rodrigo, a través de la delegación de Misiones, ha vuelto a inundar del espíritu navideño las calles de Ciudad Rodrigo con 'Sembradores de Estrellas'. A través de esa iniciativa, los niños se convierten en pequeños misioneros que llevan la alegría de la Navidad a las calles. Esta actividad está impulsada por la Obra Pontificia de Infancia Misionera que busca otorgar a los niños un papel activo en la Misión de la Iglesia. En el caso de la Diócesis de Ciudad Rodrigo, esta cita arrancó del patio del Colegio de las Misioneras de la Providencia. Posteriormente, salieron a las calles cantando villancicos y colocando esas pegatinas en forma de estrella a todo aquel que se encontraban.
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Tanto niños como adultos se detuvieron en el Mercado de Abastos, en el mercadillo de los sábados, o brevemente en la Plaza Mayor pero, sin duda, una de las partes más bonitas del recorrido fue la llegada a varias residencias de la localidad donde acompañaron con villancicos a los ancianos.
El delegado de Misiones de la diócesis, José María Rodríguez-Veleiro, destacó que los niños como protagonistas «tienen la misión de felicitar a toda la gente en nombre de los misioneros, ese es el sentido profundo de 'Sembradores de Estrellas'». Insistió en la labor que desarrollan estas personas a lo largo y ancho de todo el mundo. «Han dejado su tierra, no van a estar en Navidad porque lo han dejado todo para estar en otras tierras anunciando el Evangelio, el nacimiento del señor».
El también sacerdote de la diócesis recordó que en esas estrellas que los niños repartieron por las calles pone 'Jesús nace para todos' «y simplemente es eso, felicitar la Navidad con ese gesto, ni se pide dinero, ni nada». Concluyó destacando que los ancianos de las residencias, «esos que están más solos, agradecen la visita de un niño y viene bien a los niños y a los mayores, recibir su cariño y su alegría».
Esta cita se lleva celebrando siete años, al menos de manera ininterrumpida.
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