La covid no da tregua a la siniestralidad laboral en Salamanca: 2.200 accidentes, cuatro mortales

Pese al estado de alarma y a que la actividad no se ha recuperado al cien por cien por la crisis sanitaria y económica por la covid-19, la siniestralidad laboral ha sido alta en los últimos meses en la provincia salmantina. Desde el inicio de la pandemia en el mes marzo y hasta julio, los accidentes laborales han alcanzado los 2.200, de ellos seis fueron graves y cuatro morales, según los datos de la Junta de Castilla León.

Son 1.246 menos que en el mismo periodo del año pasado (3.446), lo que supone una caída del 36%; también la gravedad es menor, 17 accidentes frente a seis. Sin embargo, la mortalidad sube de forma alarmante, ya que el año pasado no hubo que lamentar víctimas durante el mencionado periodo y en el presente se han registrado cuatro accidentes mortales, tres en el mes de junio y uno en julio.

Durante la declaración del estado de alarma -marzo, abril y mayo-, con la actividad económica parada, excepto en los sectores de primera necesidad, la caída de la siniestralidad fue menor de lo que se puede pensar, un 38% menos en relación a los mismos meses de 2019. En concreto, se registraron 1.304 accidentes laborales, de los que cinco fueron graves; frente a los 2.116 y 12 graves de los meses de marzo a mayo de 2019 (812 más).

En cuanto a los accidente itinere, desde marzo hasta julio se han producido 90 en Salamanca, 54 de ellos durante el estado de alarma; respecto a 2019, se reducen un 37 por ciento, ya que entre marzo y julio se registraron 143, y 84 entre marzo y mayo.

Aunque el descenso es importante, el número de siniestros se mantiene elevado teniendo en cuenta la caída de la actividad.

Los accidentes laborales sin baja han continuado durante la pandemia siendo mayoritarios, algo que se repite año tras año y mes a mes. Desde el inicio del estado de alarma y hasta el mes de julio, se registraron 1.197 siniestros para los que no se pidieron baja, el 54% del total. El porcentaje es ligeramente inferior al del mismo periodo del año anterior, con 1.942 accidentes sin baja, el 56% del total.

Por lo que respecta a los sectores de actividad, desde el inicio de la pandemia y hasta julio se han registrado 898 accidentes laborales con baja, a los que hay que añadir los 83 siniestros con baja producidos itinere.

De nuevo, el sector servicios es el que acumula mayor siniestralidad, con 417 accidentes, y también los accidentes mortales, ya que tres de ellos tuvieron lugar en dicha actividad -dos en la sanitaria y uno en comercio mayor-, el otro siniestro mortal fue en el sector de la industria alimentaria.

En concreto, de marzo a julio, se produjeron 417 accidentes en el sector servicios, 257 menos que en el mismo periodo del año anterior. En el sector industrial fueron 260 -89 menos-, mientras que en la construcción alcanzaron los 147 -76 menos- y en el agrario 89 , solamente 18 menos que en 2019. Durante los tres meses del estado de alarma y pese a la paralización de la actividad en muchos sectores, también se registró un elevado número de accidentes por tipo de actividad. Así en el sector servicios, contando solamente los siniestro con baja, se produjeron 236 en el sector servicios, solo 54 menos que en los mismos meses de 2019. En la industria fueron 147( 66 menos), en la construcción 75 (57 menos) y en el sector agrario, 46 (23 menos),