Los colegios concertados católicos reclaman «una financiación justa»

Un total de 15.149 alumnos estudian en uno de los 28 centros concertados que hay en Salamanca pertenecientes a Escuelas Católicas Castilla y León. Una cifra que supone el 31,7% del total de alumnos de la provincia salmantina. Para el presente curso 2019-2020, estos centros cuentan con 626 unidades o clases, tres más que en el anterior, dos de ellas de Formación Profesional; en ellos trabajan 1.348 profesionales, entre docentes y personal de administración y servicios. En Castilla y León, hay 108 centros concertados, donde estudian 100.053 alumnos, el 28,7% de la región.

Unos datos que indican que «las familias siguen confiando y eligiendo estos centros para educar a sus hijos», según Leandro Roldán Maza, secretario autonómico de Escuelas Católicas Castilla y León, organización que aglutina a la mayoría de los centros concertados de la región. Roldán mantuvo ayer un encuentro con representantes de estos colegios en Salamanca con motivo del inicio del curso escolar y donde se abordaron, entre otros asuntos, los retos de futuro ante las nuevas elecciones generales o el nuevo equipo de la Consejería de Educación.

Sobre la Consejería, Roldán señaló que Escuelas Católicas Castilla y León tiene la intención de trabajar y reunirse con el Gobierno regional para «reclamar el cumplimiento de los compromisos electorales», además de seguir defendiendo el modelo educativo de los conciertos.

Entre esas promesas, aludió al acuerdo firmado con la Consejería de Educación para la aplicación de la Ley de la Carrera Profesional Docente a los profesores de la concertada. También solicitará que se avance hacia la «prometida» universalización de la gratuidad en el primer ciclo de Infantil, para lo que dijo «es necesario un estudio económico previo», ya que los centros de Infantil de la Consejería «no son suficientes para conseguir esta universalización».

Insistirán, por otro lado, en defender «una justa financiación» de conciertos y un aumento en la partida general de Otros Gastos, que es, explicó, la destinada al pago del personal no docente y al equipamiento necesario para llevar a cabo la labor educativa y el mantenimiento del centro. Esta partida presupuestaria «está congelada» y «sigue siendo insuficiente y no garantiza un mantenimiento mínimo», afirmó. Escuelas Católicas viene demandando desde hace tiempo que se realice «un análisis profundo con el estudio del coste real del puesto escolar para que pueda aumentar esa partida presupuestaria a nivel nacional».

Por otro lado, Roldán lamentó «la falta de crecimiento» de las unidades concertadas en los últimos años, y aseguró que es necesario una «mayor flexibilidad para nuestros centros para atender las demandas de los alumnos».

A nivel nacional, la patronal reclama un pacto por la Educación y una reforma educativa que tenga en cuenta la demanda social.

Por último, destacó la «calidad» de la Educación concertada, «complementaria de la red pública y necesaria, elegida por una amplia mayoría de las familias, por lo que la Administración debe garantizar una financiación que cubra sus derechos y certifique la libertad de elección de centro».