Carrascal continúa con la recogida de residuos en los caminos del término municipal y aledaños

«Estamos haciendo todo lo que está en nuestra mano para evitar esta acumulación de residuos y el perjuicio medioambiental y económico que conlleva. Hemos notificado a la Junta de Castilla y León la situación en aquellas zonas que le competen y hemos estado trabajando en distintos puntos de nuestro entorno. Desde el Ayuntamiento además, lanzamos un mensaje a los vecinos de Carrascal de Barregas y municipios próximos para que sean conscientes del gran perjuicio de estas acciones en nuestro entorno natural, que además es uno de nuestros mayores activos turísticos», explicó Guillermo Rivas, alcalde de la localidad salmantina.

Una de las zonas más afectadas por estos vertidos de residuos y escombros en la Ruta de la Cañada Real Burgalesa que discurre entre Carrascal de Barregas y Cabrillas y que tiene un gran valor patrimonial y natural, además de ser un recorrido muy transitado por turistas y deportistas.

Para evitar estos ataques al entorno de Carrascal y alrededores, el Ayuntamiento modificó en febrero de 2020 la ordenanza de Seguridad y Convivencia Ciudadana para equiparar las sanciones en todos los municipios del alfoz armonizando las distintas normativas y que la respuesta fuera igual de severa en todas las localidades en las que se infrinja. Con esta modificación, los vertidos y depósitos de escombros cambiaron de clasificación, pasando de ser considerados faltas leves con una sanción de hasta 750 euros, a ser tratados como faltas muy graves y una sanción de hasta 3.000 euros.

El objetivo que buscaban los responsables municipales con esta medida, es que no se fuese a depositar residuos y escombros a Carrascal de Barregas desde otros puntos de la provincia, por tener una normativa más laxa en cuanto a los vertidos.

Además de este endurecimiento de las sanciones, también hay que recordar la campaña de sensibilización medioambiental que impulsó el Consistorio hace un año y medio con la instalación de 15 carteles informativos recordando la prohibición de realizar vertidos o depositar escombros en el cualquier punto del término municipal. Un intento por concienciar a los vecinos de la importancia de llevar estos residuos a los puntos autorizados para no causar un daño medioambiental irreversible en algunas zonas naturales y evitar el impacto visual negativo.