El alumnado de Formación Profesional solo creció un 4% en Salamanca en los últimos cinco cursos

El Ministerio de Educación y Formación Profesional publicó el pasado martes su informe anual estadístico sobre el peso y la proyección de la Formación Profesional dentro de los diferentes niveles de las enseñanzas no universitarias en España. El documento del organismo que preside Isabel de Celaá arrojó como conclusión más llamativa que el número de jóvenes que cursan estudios de Formación Profesional se había incrementado, nada más y nada menos, que un 23%, durante los últimos cinco cursos.

En el caso específico de Salamanca, sin embargo, el crecimiento fue mucho menos relevante, dado que el aumento en el citado periodo solo fue del 4%. La comparativa ministerial relaciona el número de alumnos cuantificados en el curso 2017-2018 –es el periodo lectivo objeto de la investigación– con los dígitos correspondientes al curso 2012-2013. Todo ello se traduce en que se pasó de los 5.498 alumnos de hace cinco cursos a 5.735.

Sin embargo, porcentualmente, la Formación Profesional cuenta con una mayor presencia en la provincia salmantina en comparación con la media nacional. En concreto, la estadística ministerial pone de relieve que el 12% del total de los alumnos salmantinos matriculados en enseñanzas no universitarias cursan Formación Profesional, incluyendo en dicho bloque la FP Básica, así como los Grados Medio y Superior, tanto en su modalidad presencial como a distancia. Es decir, la FP atrajo a 5.735 de los 47.715 estudiantes salmantinos de los niveles no universitarios.

En cambio, la media nacional es inferior a la salmantina, dado que roza el 10% (exactamente se sitúa en un 9,9%), lo que viene a significar que se matricularon en la FP en sus diversas modalidades 815.354 alumnos, encuadrados dentro de los 8.182.396 alumnos de enseñanzas no universitarias que hay en España, un amplio abanico que comprende desde la Educación Infantil hasta el Bachillerato, abarcando también los cursos de Primaria y los de la ESO.

De esos 5.735 jóvenes salmantinos que quieren acceder al siempre complejo y difícil mercado laboral, 586 se encuentran matriculados en la FP Básica, 2.316 en el Grado Medio de la FP y 2.833 en el Grado Superior, tal como se detalla en la laboriosa investigación del Ministerio.

Si el análisis de la exploración estadística tiene como base los datos nacionales, queda patente que de los 815.354 alumnos mencionados anteriormente, hubo 372.403 que iniciaron ciclo formativo. Por enseñanza, el número de alumnos que cursaron la FP Básica –a la que se accede a partir de los 15 años dentro de la Enseñanza Secundaria Obligatoria– fue de 72.180; en FP de Grado Medio se matricularon 344.266 estudiantes y 398.908 lo hicieron en FP de Grado Superior. Respecto al curso 2012-2013, las matriculaciones suponen un aumento del 21,4%, en este último tramo.

El informe destaca que estas enseñanzas se impartieron en 3.739 centros educativos distribuidos por todo el territorio nacional, de los que el 68% son de titularidad pública. La FP Básica se ofreció en un total de 2.036 centros, la de Grado Medio, en 2.798, y la de Grado Superior, en 2.441 centros.

Según la estadística, la distribución por sexos del alumnado matriculado en los ciclos de Grado Medio y Superior es equilibrada. Así, las estudiantes representan el 43,3% y el 47,4% respectivamente. Es en la FP Básica donde se registra una diferencia mayor, con un 70,8% de hombres y un 29,2% de mujeres.

Por familias profesionales y en todos los niveles, las mujeres registran un porcentaje más elevado que el de hombres en el caso de Sanidad, Servicios Socioculturales y a la Comunidad e Imagen Personal. Los hombres, en cambio, son mayoría en Transporte y Mantenimiento de Vehículos, Instalación y Mantenimiento, Electricidad y Electrónica y Fabricación Mecánica.

En cuanto a la tasa bruta de escolarización –la relación porcentual entre alumnado matriculado presencialmente de cualquier edad y la población de las edades teóricas de cursar la enseñanza–, el informe detalla que en Grado Medio se sitúa en el 34,9%, frente al 69,7% en Bachillerato. En Superio esta tasa asciende al 39,2%.