El ‘parking’ de Garrido vendió plazas hace un año que siguen sin estrenarse

El parking subterráneo de la plaza de Garrido está finalizado desde hace meses y, sin embargo, los conductores que han adquirido plazas en sus tres plantas todavía no han podido estrenar la infraestructura. Al parecer, la demora obedece a los retrasos que está acumulando el Ayuntamiento en la concesión de la licencia de primera ocupación, requisito previo a la apertura y entrada en funcionamiento del aparcamiento subterráneo. Pese a ellos, fuentes de Santher, la empresa promotora del parking, confían en que esta semana el Consistorio les otorgue la licencia y se puedan comenzar a firmar las escrituras para dar respuesta a las necesidades planteadas por los conductores que han reservado un espacio para el estacionamiento.

El parking de Garrido cuenta con un total de 814 plazas de aparcamiento y, de ellas, aproximadamente la mitad ya han sido vendidas. Sin embargo, los farragosos trámites administrativos, derivados del enfrentamiento que mantuvo meses atrás el Ayuntamiento con la empresa promotora, han ocasionado situaciones especialmente preocupantes, como son los casos de futuros usuarios que, a tenor de los datos recabados por este diario, abonaron hace casi un año, concretamente en febrero de 2016, las cuantías correspondientes a la reserva de la plaza de estacionamiento, paso previo a la formalización del contrato, y sin embargo todavía siguen sin poder disfrutar de la plaza adquirida. Se dan casos, en este sentido, de conductores que llegaron a abonar en febrero más de 3.000 euros en concepto de reserva y preparativos del contrato y que continúan a la espera de poder acceder a la plaza que han adquirido.

De las 814 plazas, que están distribuidas en tres plantas, se han vendido ya la mitad aproximadamente. Los contratos, que suponen la entrega en propiedad sin límites temporales para los compradores, comprenden tres grandes bloques de precios, que ascienden a 17.000 euros, en el caso de las plazas más económicas, pasando por los 20.000 euros y elevándose a 23.000 las más caras.

El Ayuntamiento y Santher alcanzaron en septiembre un acuerdo para poner fin a meses de desavenencias. En virtud del mismo, la constructora se comprometió a reformar o retirar algunos de los elementos construidos en la superficie del parque, ajustándose al proyecto defendido por los vecinos. El entendimiento entre el Consistorio y Santher permitió desbloquear la paralización de las obras, que fue ordenada por el Ayuntamiento por considerar que los trabajos que se ejecutaban no respondía al diseño acordado con los vecinos. El presupuesto de esta intervención supera el millón de euros.

El futuro parque contará, entre otros elementos, con una zona de juegos infantiles, aparatos biosaludables, una fuente lúdica y una pista polideportiva.