Una nueva imagen para la calle de Becerro de Bengoa

La calle Becerro de Bengoa se verá reformada casi por completo tras la adjudicación de ayer en la Junta de Gobierno Local de las obras de remodelación del tramo comprendido entre la calle Colón y la Plaza de San Lázaro, a la empresa Osepsa, por 182.000 euros, y del soterramiento de los contenedores de basura a Hormigones Sierra, por 211.000 euros.

Ambos contratos suman más de 393.000 euros, aunque en el segundo de los casos también está incluida la actuación de soterramiento de los contenedores que se va a llevar a cabo en la calle Panaderas, «mejorando sustancialmente no sólo la imagen de ambas calles, sino también la salubridad, al almacenar los residuos sólidos urbanos bajo tierra», manifestó ayer el concejal de Obras, Facundo Pelayo, quien añadió que con estos dos proyectos, «se da respuesta a las reiteradas demandas de los vecinos residentes en ambas vías».

Con respecto a la reforma de Becerro de Bengoa, el objetivo es ampliar las aceras y soterrar los contenedores. Para ensanchar el acerado, se habrán de perder 17 plazas de aparcamiento.

En cuanto a los contenedores, el objeto de la intervención es la creación de dos isletas de contenedores soterradas, una en cada calle, en las que se ubicarán cuatro recipientes, siguiendo un modelo similar al de otras vías del centro de la ciudad, aunque las tapas estarán recubiertas de baldosas, en lugar de material plástico. La creación de islas ecológicas va acompañada de una instalación hidráulica y eléctrica que permitirá el mecanismo de accionamiento autónomo. Las arquetas deben incluir bombas de achique para posibles casos de inundación, sistemas de plataformas de elevación para las cargas laterales, tapas con su buzón, tapas elevables y un mecanismo eléctrico especial que accione el funcionamiento del sistema de carga y descarga

Asimismo, la Junta de Gobierno Local sirvió para dar su visto bueno a la propuesta para sustituir, en el marco de los Fondos Europeos que sostienen la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (EDUSI) y con un presupuesto de licitación de 242.500 euros, el césped artificial y sistema de riego del campo de fútbol de El Otero, «el primer campo de estas características que se construyó en la ciudad y que, por diversos motivos surgidos en los procesos de adjudicación anteriores, no se han podido hacer antes», aclaró Pelayo.