Muere Carmelo García, histórico hostelero de Palencia

En ese local, ubicado en el pasaje de la calle La Cestilla cercano a la iglesia de la Compañía, estuvo Carmelo al otro lado de la barra día sí y día también, siempre atento y un tanto socarrón vio pasar representantes de distintas generaciones incluso en el mismo día, con un ambiente de encuentro y relax a mediodía y otro más juerguista por la noche.

Su característica voz grave y su viveza y experiencia al otro lado de la barra le venían desde que a los 12 años ya se colocó en la tienda y el bar que sus padres tenían en Abia de la Torres. De muy joven se fue a Santander y luego regresó a Palencia para trabajar en el Concejo de Martínez de Azcoitia, en el Bora Bora de la calle Eduardo Dato y en La Encina de la calle Casañé, todos extintos establecimientos pero emblemas en su día y señeros para la trayectoria profesional de Carmelo García Martín.

También regentó la terraza de la Huerta de Guadián junto a Pancho y se encargó de su bar en el Seminario cubriéndole las vacaciones. En su larga trayectoria como hostelero figuran también la terraza del Salón y la discoteca Kenia en el Ave María, en etapas con otros amigos hosteleros que hoy le recuerdan con mucho cariño.

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Soltero y sin hijos, Carmelo era un trabajador incansable para el que no había descanso, salvo al que le obligaron los problemas de salud desde la pasada Semana Santa. El bar amaneció cerrado y Palencia supo que Carmelo estaba enfermo porque eran raras unas vacaciones. Desde entonces ha estado delicado hasta este martes, cuando ha sido encontrado muerto por un familiar que atendía al popular y reconocido Carmelo.