La lucha contra la despoblación, objetivo del nuevo subdelegado del Gobierno en Palencia

Han pasado 27 días de la toma de posesión de Pedro Sánchez y la onda expansiva del bombazo político que fue la moción de censura a Mariano Rajoy llegó ayer a Palencia en forma de cambio de subdelegado del Gobierno. Luis Miguel Cárcel se ha visto abocado a abandonar su puesto y su sucesor en el cargo, Ángel Miguel, tomó ayer posesión en un acto que despertó un gran interés en el salón de juntas de la Subdelegación del Gobierno.

El nuevo subdelegado prometió por su conciencia y honor, sin Biblia ni crucifijo, que cumplirá las obligaciones de su nuevo puesto y, poco después, pronunció un discurso en el que no faltaron loas al nuevo Gobierno y algún reproche a los populares. «Creo que, en el corto espacio de tiempo desde su constitución, este Gobierno está demostrando su determinación para abordar los problemas más candentes de este país, y lo está haciendo con prudencia, con seriedad y con fuerza. Generando esperanza en mucha gente, esperanza de que la política, la política progresista, va a servir para recuperar algunas cosas, cosas muy importantes, que costó mucho conseguir y que se estaban perdiendo o desvirtuando», afirmó Miguel en su primera intervención.

El nuevo subdelegado se ofreció como mediador entre administraciones para lograr el gran objetivo que tiene la provincia en su conjunto: la lucha contra la despoblación. «El trabajo conjunto y coordinado de todas las administraciones es necesario para esta provincia que pierde más de mil personas al año, personas, en general, jóvenes y formadas, que buscan lejos su futuro y presagian que ese futuro no será nada halagüeño para Palencia. Considero que fijar población joven es la única forma de contrarrestar el desplome demográfico y, para ello, seguro que estaremos de acuerdo en la necesidad de ayudar a la creación y desarrollo de pequeñas y medianas empresas ofreciendo la posibilidad de beneficios fiscales y optimizando servicios y comunicaciones», incidió Ángel Miguel.

El hecho de que el color político del Gobierno de la nación y el de la Junta de Castilla y León sea bien distinto también tuvo reflejo en las palabras del nuevo subdelegado, que llamó a la coordinación para dar la vuelta a los recortes sufridos en los servicios públicos. «Vamos a coordinarnos con las comunidades autónomas para revertir los recortes producidos tanto en sanidad como en educación y en servicios sociales, mejorando en lo posible su financiación», aseguró Ángel Miguel que se centró en los asuntos más sociales en su toma de posesión.

En un acto como el de ayer, tampoco faltaron las palabras de agradecimiento al subdelegado saliente, Luis Miguel Cárcel, al que tanto Ángel Miguel como la recién nombrada delegada del Gobierno, Virginia Barcones, agradecieron sus seis años de trabajo al frente de la Subdelegación. Barcones intervino también pararepasar las líneas maestras de su proyecto, en el que la despoblación ocupa un lugar preferente. «Me niego a aceptar que no seamos capaces de revertir una situación que amenaza a muchos de los 191 municipios palentinos», incidió.