Ni la lluvia logra aguar la fiesta de la ITA

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Ni la lluvia logró aguar la fiesta en Palencia a los más de diez mil asistentes, gracias en parte a que la temperatura sí acompañó durante toda la jornada. Los árboles pasaron a ser la zona más cotizada de todo el recinto en busca de cobijo ante la lluvia. La música y la fiesta continuaron su curso lidiando contra las condiciones climáticas en una nueva ITA pasada por agua.

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Las horas se sucedieron sin ningún incidente, controlado en todo momento por los diferentes dispositivos de los cuerpos de seguridad. Como novedad, en esta edición, la Guardia Civil convirtió su punto de atención en un punto de recogida de objetos perdidos, con el objetivo de reducir el número de denuncias durante los días posteriores. «El puesto de mando avanzado cuenta con todos los servicios de emergencia. Hemos establecido como todos los años un punto de información para que los jóvenes puedan recibir información o notificar sobre ciertos incidentes como hurtos de móviles o carteras o agresiones. Queremos que sea un punto de recepción de objetos perdidos porque nos ahorra luego muchas denuncias para los días posteriores», afirma José Carlos Donoso, comisario de la Policía Nacional en Palencia.

Cruz Roja ha repetido también su despliegue en el Parque Ribera Sur para garantizar las atenciones a todos los asistentes. Pese a todo, las jornadas de la mañana y el inicio de la tarde se han desarrollado de una manera muy tranquila y sin grandes incidentes. Eso sí, con la lluvia como único factor imprevisible con vistas a posibles incidencias durante las últimas horas de la fiesta. «Hemos puesto un nuevo punto de atención al detectar el año pasado que todas las heridas se producían en la zona cercana al escenario. Hemos habilitado otro punto en esa zona. A nivel de atenciones, lo de todos los años. Traumatismos, alergias, esguinces y en menor medida, las intoxicaciones etílicas», explica Antonio Tejedor de Cruz Roja.