Palencia

La investigación sobre la avioneta estrellada en Abia se encuentra «en su última fase»

En ese informe provisional, la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil informaba de que la aeronave siniestrada había despegado sobre las 7:40 horas del aeropuerto de Burgos para la realización de un vuelo local de instrucción con instructor y alumno a bordo consistente en prácticas de navegación con destino final en el mismo aeropuerto. «Según la información registrada, la aeronave había realizado un descenso controlado desde 5000 pies de altitud para posteriormente describir durante varios minutos una trayectoria cercana al suelo hasta el impacto final», detalla el informe, en el que se señala que «no se tiene constancia de ninguna comunicación por parte de la aeronave» y que sus restos principales se encontraron concentrados en el lugar del impacto.

La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil apuntaba también en ese informe provisional a las 8:15 horas como el momento del accidente, en el que, como consecuencia del violento impacto contra el suelo, la aeronave rebotó hacia arriba y volvió a caer de punta, muriendo en el acto la joven alumna de la FlyBy Aviation Academy. Por su parte, su instructor sufrió numerosas fracturas y tuvo que ser evacuado en helicóptero al Hospital de Burgos.

La alarma saltó con las llamadas desde del aeropuerto de Burgos y desde el Servicio de Búsqueda y Rescate Aéreo del Ejército del Aire en las que se informaba de la desaparición de la avioneta, con la que se perdió comunicación a mitad de vuelo. Sobre las 11:30 horas, el helicóptero de rescate de la Junta localizó la avioneta en el término municipal de Abia de las Torres, en la provincia de Palencia.

Ahora, en su declaración provisional, el organismo oficial señala que, según la información registrada, a partir de la población de Melgar de Fernamental (Burgos), la trayectoria real del vuelo dejó de estar en consonancia con la ruta planificada.

Según estos datos, la aeronave realizó diferentes maniobras, entre las que destaca una primera consistente en un giro de 360° con un viraje inicial agresivo a izquierdas, y más tarde, durante 20 segundos, describió un fuerte descenso con viraje a izquierdas en el que perdió 1.150 pies de altitud con una tasa de descenso de -3.450 pies por minuto y un ángulo de asiento de velocidad medio de -13º, incluyendo un descenso en espiral a izquierdas durante 10,1 segundos con un ángulo de balance de 62º y factor de carga de 2,1.

Posteriormente, la aeronave descendió 1.025 pies con una tasa de -1.618 pies por minuto, ganando 2 nudos de velocidad sobre el terreno (GS) y modificando su rumbo 87º a izquierdas desde 078º a 351º.

Seguidamente, durante 31 segundos descendió otros 725 pies con una tasa de -1.403 pies por minuto de manera que la altitud alcanzada fue de 2.650 pies, muy similar a la elevación media de la zona por la que estaba volando. A partir de este momento y hasta el final del vuelo, la trayectoria fue zigzagueante en planta y de continua adaptación al nivel del terreno en alzado. Finalmente, la aeronave impactó contra el terreno.

La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil reitera en su declaración provisional que no se tiene constancia de ninguna comunicación por parte de la aeronave ni de un cambio de código transponder a emergencia.

La investigación se ha centrado en el análisis de los restos de la aeronave y las marcas en el terreno; testimonios disponibles; la actuación de los servicios de rescate y emergencias; planificación y análisis del vuelo del accidente; análisis de vuelos anteriores; análisis de la operación de la ATO (organización de formación aprobada) y estudio del sistema de gestión de seguridad de la ATO.

Por último, la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil subraya que la investigación «se encuentra en su última fase» y que, una vez finalizada, se iniciará la redacción del informe final, que será publicado posteriormente.