El doble grado aúpa a la Facultad de Educación, que lanza 139 nuevos titulados al mercado

Además, lleva una década como referente en la oferta del título combinado de los grados de Primaria e Infantil. Sus estudiantes pueden ver compensado su esfuerzo, pues en un año más, es decir cinco en total, pueden obtener la doble titulación en los ambos grados, que no solo ampliará su visión de la profesión de maestro, sino que además obtendrá mayores oportunidades en el acceso al ejercicio profesional.

En este curso, la Facultad de Educación celebró en diciembre de 2024 la junta de centro extraordinaria en la que se eligió decana a Sonia Ortega, doctora del departamento de Pedagogía. Ortega tiene ahora seis años de mandato por delante en el que llevar a cabo iniciativas que permitan abrir la facultad a la sociedad y hacer de la ciudadanía un activo participativo en su actividad.

Esta designación se produjo después de que Sonia Ortega reuniera los apoyos suficientes para convertirse en decana por elección después de hasta dos de convocatorias anteriores fallidas, que obligaron a que el rector de la UVA tuviera que nombrar automáticamente a un profesor para hacerse cargo del decanato.

Tras cerrar el primer curso en el que ha estado al frente de la facultad y después de un simbólico acto de graduación de los titulados, celebrado este viernes por la tarde en el cine Ortega, considera que «ha sido un cierre de curso bueno porque no ha habido ningún incidente, ningún problema específico, además de que hemos estado con obras y lo hemos lo podido solventar», afirma con el recuerdo presente de un curso marcado por las intervenciones, primero en el edificio verde de Agrarias y después en el Aulario principal de La Yutera, común y específicamente utilizado por los alumnos de Educación. «Estoy muy contenta también porque está habiendo muchas jornadas de puertas abiertas. Hemos ido a muchos centros y han venido muchos estudiantes también a preguntar e interesarse por nuestros estudios para el curso que viene. La verdad que el cierre de curso ha sido bueno y ya estamos pensando en iniciativas que poder poner en marcha al que viene. El mandato son seis años, ahora estamos, como quien dice, tomando tierra y el objetivo es ir haciendo ciertas transformaciones y propuestas en la facultad a lo largo de este tiempo», incide.

Entre los objetivos de la nueva directiva, está la generación de espacios de innovación en la facultad «y estamos trabajando en los espacios flexibles de formación y aprendizaje para tener un aula a nivel de universidad con diferentes espacios de aprendizaje desde la idea de la innovación y esa idea de aula del futuro. También, estamos trabajando en todo lo que tiene que ver con patios escolares, en crear otra forma de entender y de trabajar en espacios escolares. Y estamos generando o queremos generar diferentes propuestas metodológicas que otorguen otra forma de entender la educación».

También recuerda la decana que hay profesores que trabajan en otras metodologías que apuestan «por ver o mostrar que enseñar no es solo dar un contenido, sino es cómo damos ese contenido y cómo generamos en los futuros estudiantes la curiosidad por aprender, la curiosidad por el conocimiento y que ellos también luego lo puedan llevar eso a las escuelas».

Respecto a la creciente demanda de matriculación, Sonia Ortega constata que sí que hay un mayor interés por las carreras relacionadas con Educación. «La tendencia desde el primer año ha sido alta. Estamos cubriendo matrículas siempre y los grupos que tenemos se cubren. En ese sentido estamos muy contentos». La carrera de Educación Infantil y de Educación Primaria o el doble grado de ambas especialidades lleva años con mucho tirón, y «luego tenemos el grado de Educación Social y de Antropología, con el que estamos teniendo movimientos de difusión para intentar conseguir más alumnado», explica.

Además, el grado de Educación Social ha cumplido ya tres décadas, «y es cierto que tanto en Educación Infantil y Primaria como Social nos conocen. Además, llevamos con Educación Social más de 30 años con esta carrera. Somos una de las primeras universidades de España en tener este grado y luego el boca a boca también nos va dando a conocer entre el propio alumnado», matiza.

La procedencia del alumnado es diversa, ya que hay matriculados de Palencia, de Valladolid o de comunidades de provincias cercanas a Valladolid y también de Cantabria, de Extremadura, y de otras comunidades autónomas como Andalucía. «Hay veces que llegan aquí de casualidad, pero luego se quedan. Tienen la oportunidad de pedir un traslado, pero no lo hacen. Esta facultad en concreto tiene una dimensión muy adecuada y hace que los alumnos tengan muchas posibilidades de becas, de propuestas pedagógicas, de participar en proyectos de innovación, de investigación, pero a la vez siguen siendo tratados como personas y no son un número. Para nosotros, cada alumno tiene un nombre, tiene una situación, que entendemos, que comprendemos y ellos se sienten de alguna manera reconocidos en ese sentido», manifiesta la decana de Educación. «Al final a lo largo de la carrera vamos conociendo su situación, sus intereses y entonces también les vamos orientando y vamos generando itinerarios de aprendizaje muy interesantes también basados en sus propios intereses y motivaciones en ese sentido. Yo creo que eso es un gran valor», añade.

Además, la Facultad de Educación señala como virtudes que al estar enclavada en una ciudad pequeña, «el contacto con las escuelas, los centros educativos y los centros de educación social o del tercer sector es muy fácil. Desde el principio tienen una formación teórica, pero también tienen una formación muy práctica y conocen la realidad desde el primer momento y eso no siempre sucede en otras facultades y en otras universidades», explica, a la vez que incide en que las salidas laborales se facilitan desde el propio campus, y eso a la vez motiva y genera más matriculaciones.

Entre los retos primordiales, Sonia Ortega destaca que «uno es crear esos espacios y poder inaugurar esa aula de espacio de formación y aprendizaje, porque el objetivo es que sea un espacio fijo, y además que es un aula fija, vamos a diseñar un aula fija a ese espacio con el objetivo de que sea un aula para nosotros como facultad, para el campus, pero también para la ciudadanía. El objetivo es que los colegios, los espacios educativos y los centros de acción social puedan hacer cosas en la facultad con ese espacio y podamos seguir tejiendo redes y espacios de colaboración conjunta. El objetivo no solo es hacia adentro, sino compartir ese espacio hacia afuera con el ámbito educativo, con el ámbito social de la ciudad de Palencia y de la provincia. Porque entendemos que la facultad tiene que ser un espacio de desarrollo y aprendizaje para todos», concluye.