Cisneros: «Somos guardianes de un tesoro heredado que debemos conservar»

El nacer en cualquier pueblo tiene una impronta y cuando se trata de un municipio como Cisneros, una villa de ilustres y con tanto patrimonio, aún más. Un simple paseo por sus calles da buena cuenta de que somos herederos de un pueblo con mucho poso. Eso marca parte del trabajo a realizar tanto en actuaciones en los bienes a conservar, como en las actividades.

Cuando alguien nos visita acude a conocer el arte sacro de nuestros dos templos, los artesonados mudéjares, los museos y colecciones que hablan de historia y costumbres, las casas blasonadas; también puede ver iconografía repartida por distintos lugares del municipio representativas de nuestra historia que son nuestro santo y seña. Toma nota de ello y sabe que aquí nos sentimos profundamente orgullosos de nuestras tradiciones. Hubo un tiempo en el que seguir la estela de nuestros antepasados era signo de decadencia. Eran años donde lo rural era denostado. Gran error en el que, afortunadamente, no caímos. Nuestra tarea es parecida a la de los templarios: Somos guardianes de un tesoro heredado, el cual debemos conservar.

A lo largo de estos 15 años se han puesto en marcha varias actuaciones como la restauración de los artesonados mudéjares, el Museo Territorial Campos del Renacimiento, la rehabilitación del centro cultural y la construcción de un auditorio. De cara al futuro seguimos trabajando en la puesta en valor del patrimonio histórico, artístico y cultural.