Un Trillo de Oro especial

«Esta fiesta nos recuerda lo que ha sido la agricultura, y la importantísima evolución que ha tenido, tan importante como para mantenerse en el primer nivel de la competitividad», subrayó ayer la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, a su llegada a Castrillo de Villavega, a donde asistió como invitada a la XV Fiesta de la Trilla. García Tejerina se refirió a la celebración de este año como una edición «especial», ya que se homenajeaba al fallecido presidente de la Diputación, José María Hernández, y la ministra fue quien entregó el Trillo de Oro a título póstumo a su viuda, María Antonia Pardo.

«Es un reconocimiento merecidísimo», afirmó titular de Agricultura, en referencia a José María Hernández, del que destacó «su vinculación a esta tierra» y «su entrega» a la provincia.

La ministra, que recibió en 2012 el mismo galardón, el Trillo de Oro, fue obsequiada ayer con una foto en la que aparecen ella misma, José María Hernández y el presidente de la Asociación La Trilla, Jaime Laso, montados en un trillo aquel año.

El homenaje al que fuera presidente de la Diputación tuvo lugar por la tarde, tras una multitudinaria comida en El Plantío, junto al río Valdavia, en la que se sirvieron 1.300 raciones de cocido.

Con anterioridad, a lo largo de la mañana, multitud de vecinos y visitantes ocuparon las tierras donde se desarrollaron trabajos de siega con guadaña y con una antigua máquina tirada por mulas. En otra tierra, otros hombres dirigían el arado romano de reja, tirado por mulas o por caballos. Las faenas de cargar el carro y empacar completaron la jornada, mientras los visitantes se hacían fotos con los animales o con una gavilla de cereal.

«Ha sido una fiesta muy positiva, y con gran afluencia», afirmó Jaime Laso. El presidente de la asociación organizadora de la Fiesta de la Trilla subrayó que esta celebración es «un homenaje a los paisanos que hicieron estos duros trabajos durante años».