Una testigo clave declarará el día 28 en el caso del crimen de la psicóloga

Una trabajadora del centro hospitalario San Juan de Dios que aún no había prestado declaración comparecerá el día 28 ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 7 de Palencia para aportar un testimonio que puede ser clave en el caso del crimen de la psicóloga Violeta Guarido Rivera, de 29 años, que murió apuñalada el pasado 6 de mayo presuntamente a manos de la interna del centro Amelia B. S., de 39 años. El juez ha decidido citar a esta trabajadora de San Juan de Dios al ser la única persona que se cruzó con la supuesta asesina instantes antes de producirse los hechos al parecer, vio a la interna a la puerta del despacho de la joven psicóloga y escuchar a Amelia B. S. hablar por teléfono. El registro de llamadas del móvil refleja que la acusaba estaba en ese momento conversando con su compañero sentimental, V. T. C., de 51 años, razón esta por la que el testimonio de la trabajadora de San Juan de Dios, «de interés» según se ha señalado desde el centro, puede ser clave para determinar el grado de imputación del hombre.

V. T. C. reiteró el pasado 3 de julio en el Juzgado Número 7 de Palencia que nunca indujo a Amelia B. S. a cometer el crimen, y que no tiene ninguna implicación en los hechos. V. T.C. declaró por videoconferencia, puesto que está recluido en la cárcel madrileña de Soto del Real después de su detención e imputación como presunto inductor del asesinato de la psicóloga, o alternativamente, como autor mediato. No obstante, sí que reconoció que el día del crimen habló antes por teléfono con Amelia B. S., como habitualmente hacía, para interesarse por su salud, pero negó que le incitara a cometer el crimen y que ella le comentase lo que iba a hacer. El compañero de Amelia B. S. aseguró que se enteró del crimen de la joven psicóloga Violeta Guarido después de perpetrarse, a través de la televisión, y que luego se lo confirmó la Policía. V. T. C. afirmó que en las charlas con la acusada le instó a defenderse. «No se tomaba la medicación y estaba trastornada, la habían tenido durante 19 días en internamiento maltratándola, y ella quiso poner una denuncia», señaló el hombre, que negó también que dejara mensajes amenazantes el día de los hechos, después del crimen, en el teléfono del psiquiatra y de la trabajadora social que atendieron a Amelia en Madrid, quienes, por su parte, reiteraron también haber recibido esos mensajes.

Los hechos se produjeron sobre las 8:00 horas del pasado 6 de mayo en el Centro Asistencial San Juan de Dios, cuando Amelia B. S., paciente del centro, accedió al despacho de Violeta Guarido Rivera (al parecer, su habitación estaba próxima) y le asestó dos cuchilladas en el cuello y el brazo con un cuchillo de diez centímetros de hoja. La psicóloga ingresó en el hospital Río Carrión en parada cardiorrespiratoria y murió en el quirófano.