Pegasus, cabalgata final
La aventura humana ·
Si Marruecos espió con ese software a su amigo francés Macron, es obvio que podríamos colegir que Sánchez y compañía pudieron estar bajo el mismo foco
Podría tratarse de la versión 3.0 del refrán 'Mal de muchos, consuelo de tontos'. Los portavoces del Gobierno anunciaron ayer que, «sin ningún género ... de dudas», Pegasus se introdujo en los teléfonos de Margarita Robles y Pedro Sánchez. Alguien en Cataluña podría aplicarse el aserto castellano y santas pascuas, todos espiados, pero allí manejan refranero alternativo. El asunto de la intervención de los móviles de dos miembros del Consejo de Ministros proviene de elementos ajenos al Estado, según Félix Bolaños, y ya ha sido puesto en manos de los juzgados. Si estos hechos son como aparentan, el suflé del caso Pegasus se quedaría en un pastel a medio hornear. Pero sucede que los secesionistas han subido a lomos del programa israelí y no hay forma de bajarlos de la grupa.
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De lo lejos que alcance la investigación de los terminales de Sánchez y Robles es harina de otro costal. Habrá quien desee conocer el material supuestamente robado, pero a causa del rango sensible de muchos de esos archivos es imposible que puedan salir a la luz pública. Así se cerraría el caso y volvemos a ser amigos de los independentistas.
Si Marruecos espió con ese software a su amigo francés Macron, es obvio que podríamos colegir que Sánchez y compañía pudieron estar bajo el mismo foco. Pero España ahora no puede permitirse acusar a Muhámad VI, dado que hemos sido reaceptados en esa espuria hermandad. Habrá que explorar otros territorios hacia los que desviar la atención y colgarles el muerto a otros. Tiene que ser un país de tres al cuarto, en el que no tengamos intereses. El objetivo final es que todos crean que los hechos que recreó Bolaños este lunes no causen demasiada acidez y que la digestión dé lugar a una plácida siesta que dure un año, o así.
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