Más desigualdad
La brecha entre comunidades y norte-sur se ha incrementado de manera inquietante
La renta media en España ha aumentado un 7% y se sitúa en 15.000 euros por persona al año, según el Atlas de Distribución de la Renta correspondiente a 2023, elaborado por el INE. Pero simultáneamente, la desigualdad entre comunidades y la brecha norte-sur también se ha incrementado de manera inquietante. Las diferencias entre la mayoría de los municipios del País Vasco, con un 91% de sus habitantes que disfrutan de la denominada 'renta alta' por encima de los 16.000 euros, y los municipios de zonas de Murcia, Extremadura o Andalucía, por debajo de los 12.500 euros, evidencia la profunda desigualdad. Pese a los buenos datos macroeconómicos, los incrementos del salario mínimo y la ayuda de los fondos europeos al desarrollo, la brecha entre ricos y pobres se está convirtiendo en un mal endémico. Un mal que no tiene visos de aliviarse mientras las fuerzas políticas de las comunidades más prósperas sigan presionando al Gobierno central, exigiendo más prebendas a cambio de sus apoyos parlamentarios. A esta imposición, que favorece a las nacionalidades más ricas, se suma la demora inacabable de una nueva financiación autonómica que corrija las diferencias económicas que, en última instancia, se acaban reflejando en los servicios públicos, la educación y el bienestar entre regiones.