Antonio Fernández sorprendió hace unos años ejerciendo de portavoz de los socialistas leoneses más veteranos, durante un acto de homenaje.

Candidato a los 99 años

Antonio Fernández ocupa el puesto número 13 del PSOE a las Cortes

luis v. huerga

Domingo, 15 de marzo 2015, 11:45

Dicen los que le conocen que tiene la cabeza mejor que muchos de los que mandan. Es cierto. Antonio Fernández, con 99 años, responde desde Ponferrada a una entrevista por teléfono. Oye perfectamente y contesta a las preguntas sin ambages, con las ideas claras y con reflexiones tan atrevidas que, simplemente, son sentido común. Este sábado, el Partido Socialista de León le incluyó en la lista de candidatos a las Cortes de Castilla y León por la provincia. Quizá un premio, un reconocimiento a un hombre que es historia viva del socialismo berciano y leonés. Un homenaje a una persona que, sin embargo, no lo comprende muy bien.

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El caso es que yo creo que no debería de ir porque los años pesan. Pero yo estoy a las órdenes del partido, sostiene. Ocupa el número trece de una lista de catorce candidatos al parlamento autonómico por la provincia de León. En esta todavía presente legislatura, el PSOE de León logró enviar a las Cortes de Castilla y León a cinco representantes. Ahora, en tiempos de bajeza que el propio Antonio Fernández admite porque el partido está regular, se alivia. Como voy casi el último, no hay problema ninguno.

El candidato que se reconoce a sí mismo como el más veterano de León reside en Ponferrada, con su hija, pero visita casi a diario su localidad de origen, Toral de los Vados. Echa de menos cuando podía conducir para desplazarse hasta allí su Land Rover de treinta y tantos años de viejo. En su pueblo tiene a los amigos con quienes disputa partidas al Subastado. Como tienes que llevar las cuentas de las cartas, hay que hacer memoria. Si estoy cuatro o cinco días sin ir, se nota en la cabeza, confiesa.

La partida para la mente, el huerto como "gimnasio"

Allí también tiene debates de política con los parroquianos del café, a quienes suele ganar en las tertulias con sus argumentos, según bromea. Ese es el ejercicio mental que le mantiene en unas condiciones envidiables. La salud le respeta y tiene en su pequeño huerto el particular gimnasio, donde mantiene tomates y pimientos y donde, de vez en cuando, le da por pensar en la política. Si alguien ha hecho algo por la clase trabajadora son los partidos de izquierda. Antes las mujeres no podían votar, no podían abortar, no te podías divorciar y el cincuenta por ciento de la gente era analfabeta. Ahora estamos yendo treinta años atrás. No hemos sido listos a la hora de saber a quién votar, lamenta.

En todos sus años de vida ha visto pasar a Alfonso XIII, a Primo de Rivera, a Francisco Franco, a Juan Carlos I y al actual rey, Felipe VI. Fue testigo de una guerra civil que le dejó recuerdos jodidos. Vi a guardias civiles violar a chicas y vi fusilar gente. Tengo muchos recuerdos, casi todos malos, confiesa. Pero este político, artífice de la consolidación del PSOE en Toral de los Vados e impulsor en la comarca del bierzo de la presencia del sindicato UGT, muestra orgullo al reconocer cómo los tiempos han cambiado, aunque guarda algún rencor.

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Podemos avanza porque el PSOE "no ha estado en su sitio"

Lo peor que le ha pasado a España en los últimos años fue cuando entró por primera vez Miguel Arias Cañete de ministro. Él es el culpable de los millones de parados de hoy en el campo porque en los pueblos, aquí y de la montaña, se vivía del ganado y de la tierra sin tener que salir del pueblo. Ahora todos los pueblos están llenos de zarzas y sin habitantes, critica. Pero tan claras tiene las ideas con el escenario actual y tres son las claves para que el PSOE, su partido, retome el rumbo que le llevó a gobernar el país.

A Antonio Fernández no le tiembla la voz para pedir unidad a la izquierda. Sostiene la filosofía de que los partidos de esa tendencia no pueden estar todo el día tirando piedras a sus tejados y que lo mejor sería tratar de ir todos juntos, cada uno con su ideología, pero sin tirarse piedras porque, asegura, Podemos está prosperando demasiado porque el PSOE no ha estado en su sitio.

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"Me cae bien el chico de Izquierda Unida"

Esa es la segunda clave para él, el auge del partido de Pablo Iglesias. Podemos está diciéndole a la gente lo que quiere oír, pero creo que, a la hora de la verdad, la gente se va a dar cuenta de que todo lo que dicen no es posible porque todavía no está el campo para estas fiestas, reflexiona. Por eso, es firme partidario de que el PSOE promulgue pactos con partidos de la izquierda porque la gente está muy enfadada porque no hay derecho a que gobiernen los que no trabajan y que vivan a cuenta de todos los demás.

La tercera referencia es a la de su líder nacional, Pedro Sánchez. Aunque confiesa que le cae bien el chico de Izquierda Unida, en referencia a Alberto Garzón, ve en Sánchez un caballo ganador, porque le nota bien y, además, él le votó el proceso de primarias del Partido Socialista.

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"Para mí, la política ha sido un estorbo"

El ahora candidato trabajó desde los 14 años en los laboratorios de la empresa Cementos Cosmos para, después, montar un horno de cal con un socio y, más tarde, dedicarse a la cerámica hasta que se fue todo a tomar por saco por la deuda de una empresa que dio quiebra.

Con un camión y con un campo de viñas que producía de 15.000 a 30.000 kilos fue tirando hasta la jubilación. Para mí la política siempre ha sido un estorbo y me ha costado dinero. Pero he salido adelante, nunca necesité limosna, recuerda ahora entre risas. Antonio Fernández admite que siempre hizo lo que pudo, reconoce tener amigos en el PP, con quien suele tener refriegas aunque de ellas casi siempre sale ganando. Yo les digo siempre la verdad y ellos la van viendo, bromea.

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