El ejército congoleño denuncia un «golpe de Estado fallido» tras frenar el asalto

Al parecer, el ataque comenzó en torno a las 4.30 horas, de madrugada, y fue llevado a cabo por hombres armados y vestidos con uniformes militares. Unas horas después, el mismo grupo de asaltantes protagonizó una incursión en el Palacio Presidencial desde donde, según una emisora de Naciones Unidas, ofrecieron imágenes en las que aparecían enarbolando la bandera de Zaire -el nombre oficial del país durante la antigua dictadura de Mobutu Sese Seko- y declararon su intención de «cambiar las cosas sobre la gestión de la república».

En una comparecencia pública poco después, el portavoz del ejército congoleño, el general de brigada Sylvain Ekenge, calificó lo ocurrido como un «golpe de Estado fallido», que había sido abortado, y en el que según afirmó habían participado «tanto extranjeros como congoleños», que todos ellos habían «sido incapacitados».

La identidad de los asaltantes no fue confirmada oficialmente pero el portal de noticias congoleño Voice of Congo identificó al cabecilla de la asonada como Christian Malanga, un miembro de la diáspora congoleña, residente en Estados Unidos y que habría muerto durante los ataques, aunque tampoco había verificación oficial de este extremo.