Alexander Skarsgård se pone a dieta para interpretar a Tarzán

Alexander Skarsgård, que saltó a la fama por su papel en la serie de vampiros 'True Blood', ha tenido que someterse a una estricta dieta para conseguir la musculada figura necesaria para ser el nuevo Tarzán en la película 'La leyenda de Tarzán', de David Yates.

Para ponerse a tono, el actor ganó 11 kilos, tomando 7.000 calorías al día, es decir, tres veces más de lo que comía habitualmente. Una dieta que acompañó de ejercicios de levantamiento de peso para conseguir el físico que ya se ha visto en algunas imágenes del filme. Pero en la ingesta de alimentos había limitaciones ya que tenía prohibido comer azúcares, gluten, trigo, leche y, por supuesto, alcohol. Tenía que hacer seis pequeñas comidas a lo largo del día y entrenar dos veces al día.

Una dieta tan estricta acabó por desesperar al actor hasta el punto de que cuando por fin le permitieron comer una manzana, la besó antes de comérsela. Además, el intérprete reveló a 'Entertainment Weekly' que, tras el rodaje, se pasó cuatro días en la cama mientras su padre le llevaba comida.

La nueva versión de Tarzán llegará a los cines el próximo 22 de julio bajo el título de 'La leyenda de Tarzán', con Alexander Skarsgård como Tarzán, Margot Robbie como Jane y Christoph Waltz como Leon Rom.

En esta versión han pasado años desde que el hombre conocido como Tarzán abandonara la jungla de África por una vida más aburguesada como John Clayton III, Lord Greystoke, en compañía de su amada esposa, Jane (Robbie). Pero es invitado al Congo como emisario del Parlamento, sin sospechar que, en realidad, es un peón de un plan basado en la codicia y la venganza del capitán Leon Rom.

Samuel L. Jackson, Djimon Hounsou, John Hurt y Jim Broadbent también intervienen en la cinta, basada en el popular personaje creado por Edgar Rice Burroughs.