Los problemas de suministro por la 'crisis de los contenedores' marítimos podrían persistir en 2022

Hace unos días saltaban las alarmas: la campaña comercial de Navidad está en peligro, puede que bastantes juguetes y otros bienes no lleguen a tiempo y otros sí lo harán pero con el precio disparado. Muchos consumidores están deseosos de celebrar una Navidad 'normal' y de gastar dinero en regalos pero no va a ser tan sencillo. Los puertos están colapsados y el tiempo de transporte ha aumentado considerablemente. Los precios ha subido muchísimo por la escasez de contenedores y de servicios. Enviar un contenedor se ha multiplicado por diez: antes de la pandemia costaba unos mil euros y ahora se aproxima a los diez mil. Y todo parece indicar que esta situación no acabará tras la Navidad.

Así lo confirma la multinacional Ikea, que avisa de que los problemas de suministro, lejos de solucionarse de solucionarse cuando acabe 2021, se mantendrán en 2022, y reconoce que afectará al stock de sus tiendas.

Prácticamente igual de pesimista es Mark Simmonds, director de asuntos externos de la Asociación de Puertos Británicos, quien señala que esta situación, debida a las perturbaciones del tráfico mundial causadas por la pandemia, dura ya «más de un año» y «continuará durante otros seis o nueve meses», lo que apunta al verano que viene.

El secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg, también ha advertido de que la llamada 'crisis de los contenedores' podría durar «hasta el año que viene».

Todo esto, unido a la crisis energética que está viviendo China y la llegada del frío al hemisferio norte, podría agravar más aún la situación.

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