Coello doma a Lebron y ya tiene su Plaza Mayor

El ganador local del Oysho Valladolid Premier Padel P2, que junto a su compañero, ha dado lustro a un evento que pone en valor a la ciudad y la abre a nivel internacional, con el único 'pero' de una ola de calor que puso a más de aprietos a uno -y a una- y no solo jugadores dentro de la caja.

Coello y Tapia levantaron los brazos en la final (7-5 y 6-4) ante la pareja formada por el carismático Lebron y el voluntarioso Stupa, que en el partido definitivo fue mejor que su compañero, pese a la concentración de flahes o los aspavientos del gaditano.

Y eso que el partido comenzó de cara para la pareja 'visitante', que aún así goza de una legión de fans allá dónde va. El jugador andaluz, que durante muchos golpes, y sobre todo en el primer set, fue arengado con esos aullidos tan característicos a su figura, llevó la batuta en los primeros compases. Parecía esa continuación del encuentro de semifinales ante el Chingoto y Galán, en el que Lebron y Franco Stupa se sobrepusieron a todo para ganar y firmar en el mejor partido del torneo pucelano.

Inercia positiva en el saque, con un servicio inmaculado para ellos, con más problemas para Coello y Tapia, que se las veían y deseaban para ganar los suyos por la mínima. Se pusieron 4-5, con rotura de servicio, pero le entraron las dudas a Lebron, quizá también lastrado por unos problemas de espalda, visibles y que le llevaron en más de una ocasión a la silla, ovacionado por los suyos.

No fueron capaces de cerrar el set, y los números 1 del raking le devolvieron el servicio y terminaron por llevarse la manga por 7-5, en un momento donde ya todo eran dudas para los de Carlos Pozzoni, que también ha tenido trabajo -y mucho- durante toda la competición en el Caja Rural de Zamora Stadium–Plaza Mayor.

El triunfo además de golpear mentalmente a los de rosa, también les ajustó las piernas, mitigadas por el esfuerzo del partido de semifinales, y que hasta ese momento no se había notado con el viento a favor.

Con el partido en contra, los golpes fueron de Coello y de Tapia, más descansados, y con una zurda letal del héroe local, siempre bien asistido y compenetrado por el argentino.

Así hasta el 6-4 definitivo, que cayó por inercia, con el grito de guerra del jugador vallisoletano, que -por fin- logró la victoria en su Plaza Mayor, después de que el pasado año ya levantase los brazos, pero en el Polideportivo Pisuerga.

En el cuadro femenino, Ariana Sánchez y Paula Josemaría recuperaron el número 1 del ranking. Lo hicieron después de un partido muy inteligente en el que superaron a Bea González y Claudia Fernández.

Al igual que en el cuadro masculino, las ganadoras no dieron lugar a la especulación y se llevaron el trofeo por la vía rápida (6-4 y 7-5), y todo pese al gran partido de la malagueña Bea González, quizá la mejor jugadora del torneo -por lo menos de la final-, pero que no se vio acompañada en este caso por Claudia Fernández.

La joven jugadora madrileña pagó los errores y se vino abajo en un momento del partido en el que Ariana y Paula evidenciaron que buscaban a una padelista que aún no ha cumplido los veinte años.

Las nuevas reinas del ranking se resarcen de la final perdida del año pasado en el Polideportivo Pisuerga y levantan el trofeo internacional pucelano en la Plaza Mayor.