El Caja Rural Aula agarra el 'play off' con lo justo

Octavas, sin posibilidad de escalar o descender de posición, las chicas de Salva Puig disputarán los dos últimos partidos de la fase regular, ante el Rocasa en Gran Canaria y el BM Granollers, con el objetivo de elevar su nivel de juego para encarar las eliminatorias por el título con un mínimo de posibilidades.

La realidad actual es que, pese a la victoria contra el BM Zuazo, el equipo atraviesa un bache de juego, sobre todo en defensa, donde la sangría de goles amenaza cualquier opción de futuro de las blanquiazules. Este sábado, ante un rival muy inferior y que en el minuto dos ya acumulaba dos pérdidas, no fue capaz de sentenciar el choque por la vía rápida y se tuvo que ir hasta los últimos cinco minutos de partido para encarrilar el encuentro. Y lo hizo porque hoy por hoy, en duelos como el de ayer, contar con María Prieto O'Mullony –o media María Prieto– le puede hasta valer. Que el ataque se atasca... Aparece la lateral internacional para soltar la mano y que la portera visitante no sepa si el balón ha pasado o aún esté en el aire.

La zamorana terminó como máxima goleadora del encuentro con diez dianas, pero es que en los primeros diez minutos de partido suyos eran cinco goles de los siete que llevaba el Aula en su casillero (7-4, min. 10).

Precisamente, una de las variables que le queda al equipo pucelano, además de elevar su nivel de juego –y defensa– en los partidos restantes es saber si su goleadora finalizará o no como 'pichichi'.

Por momentos, en esos primeros instantes del choque, y con el técnico visitante pidiendo tiempo para ver como se frenaba a la zamorana, se podría pensar que María está en disposición de lograr ese título individual antes de marcharse a Polonia.

En Huerta del Rey se quedará Maryanna Rodrigues, que ante el equipo vasco disputó su mejor partido con la camiseta del Aula, y le dio el relevo a O'Mullony en la primera mitad para mantener una renta cómoda ante las visitantes.

La brasileña se fue a los siete goles, y el técnico local tiró de ella cuando el Zuazo amenazaba con meterse en el partido en la segunda mitad (21-19, min. 41). Ahí estuvo la clave para que las vallisoletanas no sufieran más de la cuenta. En los goles de ambas, y en las paradas de Carmen Sanz, que a la chita callando terminó con diez blocajes, pero realizando dos intervenciones claves con ese 21-19, y con Salva Puig pidiendo tiempo para frenar la racha visitante y una defensa 5-1 que funcionó y terminó por dejar los puntos en Valladolid.