Al asalto de Can Barça

Contra el Barcelona B, el Viveros Herol Nava consiguió uno de sus primeros triunfos de gran prestigio del curso. Llegó en la tercera jornada de Liga y se vivió con gran emoción, asombrado como estaba Nava de la Asunción por recibir al Fútbol Club Barcelona.

Para muchos se cumplía un sueño. Los azulgrana son desde hace años el gigante que todo el mundo dentro del balonmano trata de imitar pese a que sea imposible alcanzar su talla económica. Se admira su filosofía de trabajo y el aura de grandeza que irradia.

Por eso, la visita que el Viveros Herol Nava rinde este sábado (18:00 horas) a la Ciudad Deportiva Joan Gamper es tan especial. Poder pasear por esas instalaciones es un privilegio para cualquiera, incluso para los antibarcelonistas. Muchos pagarían por poder jugar un partido como el de este sábado, en el que se asiste a la oportunidad de acercarse al ambiente de trabajo de los Gonzalo Pérez de Vargas, Viran Morros o Víctor Tomás, en el caso del balonmano, y de los Leo Messi, Neymar, Luis Suárez, Juan Carlos Navarro o Marcelinho Huertas, en el de las secciones azulgranas de fútbol y baloncesto. Un lujazo.

La magnitud de todo lo que rodea al Barcelona obliga al equipo que entrena Álvaro Senovilla a extremar la concentración para no perder la perspectiva respecto a lo realmente importante en su desplazamiento de este sábado. El partido se presenta como una oportunidad de dar un golpe en la mesa frente a un rival que también está luchando en la zona noble de la clasificación.

El filial azulgrana es cuarto (el Nava sexto) con 23 puntos, dos más que los naveros, que vienen de cosechar dos triunfos consecutivos. La regularidad no abandona al equipo de Álvaro Senovilla, que sigue mostrándose muy fiable en todas las canchas. Ante el Barcelona B, se enfrenta a un desafío mayúsculo comparable a los que tuvo que afrontar en las canchas del líder el Teucro y del Go Fit, en las que no pudo sumar.

Toma el ejemplo del Handbol Bordils y del UCAM Alcobendas, que han sido los únicos hasta el momento capaces de conquistar el feudo azulgrana. «En Barcelona es muy difícil ganar. Entrenan muchísimo durante la semana y tienen, por ello, un nivel competitivo muy alto», explica Álvaro Senovilla, que apunta una de las claves del choque: «Tenemos que conseguir que su contraataque no sea efectivo. Ellos te obligan a jugar a un ritmo altísimo y, en cambio, en el ataque estático les cuesta más».

Quizás esa dificultad en el ataque estático sea una de las pocas lagunas visibles del Barcelona B, que la semana pasada logró llevarse los dos puntos en una cancha muy complicada como es la del Meridiano Antequera. «Y en casa se muestran más fuertes», avisa el entrenador del Viveros Herol Nava, que daba prácticamente por segura la baja de David Fernández para el encuentro de esta tarde.

El lateral vallisoletano arrastra un esguince en el tobillo que le ha impedido entrenar en toda la semana. Ya jugó tocado el sábado pasado ante el Amenabar Zarautz y lo más probable es que tenga descanso esta semana. Es la única baja, en principio, con la que el equipo navero afronta este duelo tan especial.