Un maleficio roto

El Quesos Cerrato sumó este domingo un nuevo triunfo en la presente temporada, en esta ocasión en Lugo ante un Breogán al que no había ganado nunca en su pista. Fue una victoria trabajada, en un duelo en el que los de Sergio García llegaron a perder por trece puntos en el tercer cuarto. McCarron, con una gran segunda mitad, ayudado de Barnes, Joan Tomás y Dani Rodríguez, dieron la vuelta a un partido a base de defensa y sacrificio.

El Quesos Cerrato empezó muy serio en el Pazo Provincial Dos Deportes de Lugo, con Dani Rodríguez llevando el timón y toda la responsabilidad anotadora. El base catalán anotó 13 puntos en los primeros siete minutos de partido y puso a su equipo con una buena ventaja en el marcador (10-18) a dos minutos de la conclusión del primer cuarto. Lisardo Gómez, técnico del Breogán, paró el partido y buscó soluciones, pero las indicaciones del entrenador no surtieron el efecto deseado y el Quesos Cerrato continuó con su línea ascendente. Gracias a ello se fueron ganando al final del primer cuarto por once puntos, 10-21.

En el segundo cuarto, el Breogán salió mucho más metido en el partido, no quería que se le escapara el partido. Los lucenses lograron un parcial de 6-0 que obligó a Sergio García a parar el encuentro, calmar los ánimos y buscar contrarrestar la agresividad de los locales. Con el marcador 16-21 y prácticamente todo el cuarto por delante, Barnes volvió a la pista y puso la cordura necesaria. Pero la alegría poco duró, el conjunto local siguió con la agresividad en las líneas de pase y unos muy buenos minutos de Pep Ortega, reciente fichaje breoganista, que anotó nueve puntos en un abrir y cerrar de ojos, le dieron la vuelta al partido (25-24), a cinco minutos para el descanso.

Sergio García volvió a meter a Dani Rodríguez y Marc Blanch en la cancha, pero la muñeca del base catalán ya no estaba tan fina como al principio. Sin acierto, solo quedaba el oficio, y eso lo puso Lamont Barnes, que hizo un buen destrozo bajo el aro local. Pero eso no fue suficiente para parar al Breogán de Lugo, que gracias a la aportación del escolta Álex López, con once puntos al descanso, cogió ventaja en el marcador y dejó al Quesos Cerrato por detrás en el intermedio del partido, 38-32.

Tras el paso por los vestuarios, García cambió el quinteto de salida de su equipo, metió a Roma Bas y a Fakuade en detrimento de Urko y Mccarron, pero el Breogán continuaba con la línea ascendente y cogió la primera buena ventaja del partido, trece puntos de renta (47-34), en tan solo tres minutos. Barnes se tuvo que ir al banquillo debido a un golpe y Sergio García tuvo que parar nuevamente el partido. Su equipo no funcionaba, estaba espeso en ataque y ahora el Breogán veía el aro como una piscina grande.

Pasaban los minutos y el Quesos Cerrato no conseguía reducir la diferencia en el marcador. A falta de tres minutos para entrar en el último cuarto, el resultado era 53-40. En ese momento llegó la reacción visitante. Fakuade, tanto en ataque como en defensa, comenzó a imprimir carácter y agresividad, y gracias a ello los palentinos volvieron a meterse en el partido (53-45) a dos minutos del final del tercer periodo. Lisardo Gómez no quería sorpresas, creía tener el partido controlado y pidió un tiempo muerto que no sirvió de nada. El Quesos Cerrato se vino arriba gracias a su buena defensa y a las transiciones rápidas y consiguió ponerse a tres puntos (53-50), pero el Breogán logró en el último minuto volver a ampliar las diferencias, para entrar en el último cuarto con un resultado de 59-52.

Todo estaba por decidir. El Quesos Cerrato salió sin miedo a nada y en minuto y medio ya apretó el marcador (59-56). Dani Pérez dio otro rumbo a su equipo e hizo que empatara el partido a siete minutos de la conclusión, 59-59. Quedaba un mundo, pero los visitantes habían hecho lo más difícil, ahora solo quedaba sellar la remontada. A cinco minutos del final lo consiguieron y se pusieron por delante (61-62), gracias al buen hacer de un regular Joan Tomàs. El Breogán quedó noqueado con la remontada palentina, pero consiguió sobreponerse para empatar nuevamente el duelo (64-64) a tres minutos del final. Pero McCarron, con nueve puntos en la segunda parte, volvió a poner a los palentinos por delante, 64-67. A partir de esa canasta, el Quesos Cerrato se hizo grande y gracias a una defensa que desesperó al equipo local se llevó el partido (70-79).