La Danza agota las entradas

Inició «Córdoba» (Cantos de España, op. 232/4 de I. Albéniz); breve piano y salida de la bailaora, traje de faralaes blanco y mantón, expresiva en manos y gestualidad corporal, movimientos rítmicos y acompasados con el mantón, sobre el firme toque de la pianista. «Andaluza» (Danzas españolas, op. 37/5 de Granados), sin mantón, con abanico, limpio zapateado y final con baile a solo. La 37/2, «Oriental», más lenta, sentimental y lírica, tuvo a la bailaora de rojo, estilizada en traje y movimientos. Sin pausa, atacaron la «Zambra» (Danzas gitanas, op. 55/1 de Turina), castañuelas añadidas bien jugadas y zapateado en vibrante final de ambas. Albéniz volvió con «Asturias» (Suite española, op.47/5), bata de cola negra, movida en giros hábiles y vistosos y manos que hablaban. Todo con un clamor en la sala, que dio pie al rasgado canto de Almudena «24 horas del día...» (Lorca), compás al tacón y manos del dúo sobre el piano, más el breve y sentido trabajo de Eva, dedicado a la Cartagena natal de Almudena, premiado con el público en pie.

Tres interludios para la pianista erizados de dificultad: Sonatas R88 y 84 del Padre Soler (homenaje al inicio del baile español que coreografió Antonio en la Escuela bolera), «Canción y Danza nº 1» («La filla del Carmesí» y Danza de Castelltersol) de Mompou y «Fantasía Bética» de Falla, con general acierto.