Las castañuelas, protagonistas en Simancas
«Tomás Martín está logrando recuperar esta instrumento para la clásica, encargando repertorio original»
Patio completo y tarde-noche agradable como el concierto, atractivo por ver y de escuchar a Tomás Martín (Madrid, 1970), profesor de la OSCyL y del Conservatorio Superior de Salamanca, quien, fruto de su investigación, dedicación y pasión por las castañuelas, está logrando recuperarlas para la clásica, encargando repertorio original. Asistimos así al estreno absoluto de 'Pasotango' (pasodoble-tango) de María José Cordero, compositora y música polifacética (La Somoza, Astorga y ponferradina de adopción), egresada del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, cuyas partituras son más reflejo de sensaciones y emociones que elaboración musical, optando por la pura sencillez.
Publicidad
Tomás, que lució un set de pares hecho de granadillo negro africano, con distintos diámetros y pesos según color y timbre buscados en cada obra, ha construido una técnica variadísima de repiques, golpes, dinámicas avanzando una u otra mano o en círculo y ajustando el pulgar de suspensión y resto de dedos a cada peso, para lograr «hacer música» además de ritmos o percusión. Las tres piezas (Op. 47/3, 5 y 7 y la Op. 232/4 de Albéniz) avalaron todo ello, destacando las seguidillas de 'Castilla' y 'Córdoba', con orquesta y solista concertando plenamente.
La Camerata Iberycas estuvo hábil acompañando y notable en los dos números de 'Suite Bergidum' de María José Cordero (en especial 'Valle del silencio', ecos de 'Dies irae' en solos de viola y violonchelo, y de Violín I con sabor andalusí) y 'Oración del Torero' de Turina. Todo con cálida acogida, obligando a añadir a solista y orquesta, vibrante preludio de 'La Boda de Luis Alonso'.
3€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión