Franquicia impropia

Es curioso cómo las franquicias funcionan e incluso se prolongan, admiten añadidos cuando es mínimamente posible y significan la violencia, exageradísima, las rupturas familiares y un tipo de delincuencia colectiva, como de sectas. Afortunadamente los films son mucho más serios que las interminables y a veces confusas series con sus latiguillos y defectos que hablan de costos y dedicación.

Si este film está lleno de repeticiones que lo hacen muy comercial, tiene asimismo secuencias de empeño y planos espectaculares (los del fuego) y cierta entidad seria, aunque el conocimiento de los otros episodios de la franquicia sería necesario para atar los cabos sueltos.

Otro aspecto positivo es la interpretación, muy ajustada y con un terremoto que se llama Ana de Armas. Cada actor ha estudiado su personaje y ello ha dado seriedad en medio de las secuencias de lucha y los tiros. Un film que pasa en muchos momentos de infantil a serio para enseñarnos la parábola del baile y la muerte, porque los crímenes se asemejan bastante a los movimientos de la danza.