Las ventas del comercio minorista en Castilla y León cayeron un 30% en abril

Las ventas del comercio al por menor de Castilla y León descendieron un 30,4% en abril en comparación con el mismo mes del año anterior, frente a un -31,5% en España, mientras que el empleo cayó un 1,4%, de nuevo mejor dato que en el resto de país donde la empleabilidad ha bajado dos puntos, según ha informado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El INE recuerda que estos datos son consecuencia del impacto de la crisis sanitaria del coronavirus y la suspensión de la apertura al público de muchos locales y establecimientos minoristas por la declaración del estado de alarma y calcula que en torno a un 46% de las empresas del país permanecieron cerradas al público.

Se trata, en concreto, de la novena menor caída de las ventas del comercio minorista que en abril descendió en todas las comunidades autónomas lideradas por Canarias (-39,7%), Islas Baleares (-39,0%) y Andalucía (-34%), con menor incidencia en Galicia (-23,4%), Castilla-La Mancha (-26,2%) y País Vasco (-27,2%).

Además, según informa Europa Press, en lo que va de año las ventas del comercio al por menor también registran tasa negativa en Castilla y León (-10,3%), dos décimas más que en España donde han caído un 10,1%.

A nivel nacional, con este desplome, el mayor de toda la serie histórica, las ventas del comercio minorista encadenan dos meses consecutivos de retrocesos después de haberse hundido en marzo más de un 14%.

En cuanto a la ocupación, Castilla y León registra el séptimo menor descenso del país en la evolución del empleo del comercio minorista que cayó en todas las comunidades autónomas en tasa anual lideradas por Islas Baleares (-6,3%) y Canarias (-3,4%) y menor incidencia en La Rioja (-0,3%).

En comparación con el mes anterior la ocupación hao caído ocho décimas en Castilla y León, tres décimas menos que en España (-1,1%), mientras que en lo que va de año ha caído una décima (-0,2% en el resto del país).

El INE señala que el efecto del estado de alarma sobre el comercio minorista se ha visto diluido por la posibilidad de las empresas de acogerse a expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs), en los que el personal sigue formando parte de la empresa.