PSOE y sindicatos vigilarán que «se cumplan» los pactos del Diálogo Social

Lo segundo era la foto de los dos líderes sindicales con el socialista Luis Tudanca, en sede parlamentaria, «para celebrar la enorme satisfacción tras la firma de los acuerdos del Diálogo Social entre el Gobierno, sindicatos y patronal, después de años complicados». La salida de Vox se festeja aunque, como le reprochan a Mañueco desde la bancada socialista, haya sido «a petición propia» y no por decisión del bando popular. «Son los primeros acuerdos que se firman desde el año 2021, después de que hubiera un partido político empeñado en acabar con ellos», decía Tudanca.

Ese matiz es la parte de renuncia que le corresponde a los sindicatos en esta escenificación del acercamiento Gobierno-agentes del Diálogo Social. La de cargar las culpas en el que ya no está en el Consejo de Gobierno. El PP, durante la etapa Veganzones, trató de mantener vivos los diferentes programas de sus consejerías con los sindicatos y la patronal, por lo que la crítica a posteriori se centra solo en la cuota de Vox.

«El Diálogo Social ha estado a punto de morir», decía Tudanca, que recibía las gracias de los sindicatos «por haber apoyado en las duras y en las maduras» las reivindicaciones del Diálogo Social. Y acto seguido los tres perfiles, CCOO, UGT y PSOE, comenzaban con lo que viene ahora. Que es la reivindicación de que se cumplan los acuerdos firmados y se «revitalicen» otros asuntos. Y coincidieron, como era de esperar. «La inmigración, la igualdad o la lucha contra la violencia de género», enumeró Tudanca y repitieron Temprano y Andrés.

El de CCOO advirtió que «hay que empezar a negociar cinco mesas sobre empleo, que es donde se va a ver la disposición del Gobierno». Y tanto él como el de UGT hablaron de otro de los puntos que permanecía vetado con Vox en el Gobierno, el de la memoria histórica. «Vamos a pedir que se convoque el Consejo de Memoria Histórica y Democrática. Toca elegir presidente y empezar a funcionar y cumplir la ley», decía Vicente Andrés. «La inmigración, la extensión del Servicio de Relaciones Laborales y el Consejo de Memoria Histórica», desgranaba Temprano como los próximos temas pendientes.

Los tres se comprometieron a vigilar el cumplimiento de los acuerdos firmados el pasado viernes con la Junta de Castilla y León. «Que lo firmado tenga continuidad», exigía Temprano. «Hay acuerdos de ayudas a las personas en vivienda, en educación, becas... Se trata de que se cumplan los acuerdos. Hemos pedido que se vigilen desde las propias Cortes de Castilla y León», señalaba Andrés.

Así que esa tarea recaerá en la oposición y, por ende, en el PSOE, que es el grupo mayoritario en ese hemiciclo opositor que ahora forman siete partidos (PSOE, Vox, UPL, Soria ¡Ya!, Unidas Podemos, Por Ávila y Francisco Igea). Para empezar, solicitarán que se reúna la Comisión del Diálogo Social en las Cortes de Castilla y León «que hace tres años que no se convoca».