Desmantelada una red que distribuía cocaína en Salamanca, León, Valladolid y Burgos

Precisamente en la provincia vallisoletana, además de en Madrid y Bilbao, es donde han tenido lugar algunos de los 23 registros que han servido para desmantelar este entramado especializado además en el blanqueo de dinero. Sus integrantes utilizaban uniformes policiales y elementos luminosos «para actuar como policías ful», como se puede leer en la nota de prensa difundida por la Benemérita y en la que se detalla el resultado de esta operación, bautizada como Águila-Frazen.

En total, se les han incautado 239 kilogramos de cocaína de gran pureza, 754 gramos de resina de hachís y se ha desmantelado un laboratorio de adulteración de droga ubicado en Getafe. Igualmente, a los detenidos en esta operación realizada por la Guardia Civil en colaboración con la Policía Autónoma Vasca, varias policías locales e incluso la DEA estadounidense, se les han intervenido 697.000 euros en efectivo, cinco armas de fuego, armas prohibidas y armas blancas.

La mayoría de los arrestados cuenta con antecedentes policiales e incluso «uno de los grupos desmantelados tiene una estrecha vinculación con la extrema derecha, contando alguno de sus cabecillas con antecedentes por homicidio».

Al parecer, la organización distribuidora de las sustancias estupefacientes estaba ubicada en Madrid y a la capital se desplazaban el resto de bandas a recoger la mercancía y trasladarla a los puntos de distribución. Durante el estado de alarma decretado con motivo de la pandemia mundial de coronavirus utilizaron tapaderas que les servían para simular estar trabajando y poder viajar sorteando los controles policiales.

Las investigaciones constataron que en estas transacciones los detenidos contaban con teléfonos encriptados e inhibidores de frecuencia y siempre tenían personas que realizaban labores de seguridad. Además, habían creado «sofisticados dobles fondos» en sus vehículos para poder transportar el dinero y la droga sin ser descubiertos.

El comienzo de los trabajos para echar abajo este entramado se remonta a 2018, cuando agentes expertos en delitos económicos de la Comandancia de Madrid investigaban el presunto blanqueo de capitales a través de la compraventa de vehículos de alta gama.

Los investigadores dieron con un conjunto de bandas, hasta cuatro, que tenían como nexo de unión un grupo encargado de suministrar desde Madrid cocaína procedente de Sudamérica y que era distribuida «en cantidades de notoria importancia» por Madrid, Toledo, Salamanca, León, Valladolid, Asturias, Bilbao, Cantabria, Zaragoza y Burgos.

Expertos en blanquear dinero, a los detenidos se les han bloqueado 203 cuentas bancarias con más de 750.000 euros, 121 vehículos (en su mayoría de alta gama) y 43 inmuebles repartidos por toda la geografía nacional.