Hablar de Candeleda es referirse a una zona privilegiada al suroeste de la Sierra de Gredos y el lugar donde se localiza la línea de cumbres del sur del circo de Gredos, con el pico del Gutre o el Almanzor, como referentes.
Esta situación natural también ha marcado nuestra historia, de la que tenemos referencias de hace 3.000 años.
Pero la parte de la historia de la que me quiero ocupar en estas líneas tiene que ver con el pimentón cuya transformación del pimiento en pimentón ha sido una de las actividades que más riqueza han dado a la zona hasta el siglo XX. Este modo de vida también forma parte de nuestra historia, de lo que somos, sin olvidar de dónde venimos. Todavía hoy se conserva la zona de los sequeros, una pieza genuina y singular del patrimonio arquitectónico de la comarca de Candeleda. En sus inicios en el siglo XVII fue concebido para el secado rápido de pimientos mediante la exposición al humo.
Noticia Relacionada
Consulte nuestro especial Municipalismo. Memoria Viva de Castilla y León
Y si de historia se trata, la que atesora el Santuario de la Virgen de Chilla, patrona de Candelada cuyas fiestas, declaradas de Interés Turístico Nacional, se celebran el segundo y tercer fin de semana de septiembre. La leyenda narra la aparición de la Virgen a un pastor llamado Finardo mientras estaba con sus cabras y una de ellas murió por comer hierbas malas. La Virgen resucitó a la cabra, hecho por el que ahora siempre aparece representada.