Borrar
La duquesa de Alba y Capel, con el retrato, el martes en el palacio de Liria.
CULTURA

Capel y la mirada de la duquesa

El pintor palentino regala un retrato a Cayetana de Alba en el madrileño palacio de Liria

FERNANDO CABALLERO

Miércoles, 27 de febrero 2013, 21:55

La noble española que más títulos atesora, María del Rosario Cayetana Fitz-James Stuart y Silva, la popular Cayetana de Alba o duquesa de Alba, ha recibido este martes un regalo muy especial. Adelantándose a su 87 cumpleaños, que celebrará el 28 de marzo próximo, Cayetana ha sumado un nuevo retrato al centenar que ya posee en su colección particular. El autor no es otro que el pintor palentino Antonio Guzmán Capel, que ha trabajado desde octubre en un retrato que la inmortalizará sentada en una señorial silla de su residencia madrileña, el palacio de Liria.

Precisamente, fue en uno de sus salones donde se celebró la recepción en la que Capel entregó el cuadro a la duquesa de Alba. Allí estaba su marido, el palentino Alfonso Díez Carabantes, que no conocía personalmente al pintor, pero sí de referencia. A la salida del palacio, el artista se mostró muy satisfecho de su encuentro con los duques. «El retrato les ha encantado y les ha gustado muchísimo. Ella no hacía más que mirarle. Le miraba y le miraba fijamente», aseguró el pintor. «Lo que más le ha gustado es la mirada del retrato», apostilló un Capel entusiasmado por la experiencia de la visita a la residencia de los Alba.

El retrato tiene una historia simple. Un amigo común, Luis Enrique Fernández Santos, ha sido el nexo común, el enlace entre el artista y la duquesa. «Yo siempre he tenido mucha ilusión por retratar a esta mujer. Me parece una persona muy elegante y valiente, que se sale de su tiempo, hace lo que le da la gana, sin importarle nada ni nadie», asegura Capel cuando explica cómo se gestó el cuadro. El pintor pidió a Luis Enrique Fernández que planteara a la duquesa si aceptaba que le pintara un retrato, que le regalaría personalmente. «A la duquesa le gustó la idea, se informó sobre mi pintura y aceptó», resume Capel.

En la recepción de ayer se encontraban además de los duques y del pintor, la mujer de este, la también pintora Marián López; una hija de ella, Natalia; la secretaria de la duquesa y Luis Enrique Fernández Santos, el amigo común. Capel y su mujer destacaron la amabilidad mostrada por el noble matrimonio y la sencillez del trato, y especialmente de Alfonso Díez, «que me ha pedido que cuando exponga en Madrid le avise para ver la exposición», relató el artista palentino.

La pintura de Capel se unirá en la ingente colección de obras de arte de la duquesa a otros retratos que la han inmortalizado, especialmente los del pintor Zuloaga y el escultor Mariano Benlliure. En la mente de Picasso solo quedó su intento de retratarla desnuda, como hiciera Goya con su antepasada, un proyecto que ella rechazó «creo que me hubiera agobiado, eran otros tiempos», declaró en una entrevista cuando recibió la propuesta a través de Luis Miguel Dominguín, ya que el genial artista malagueño y Cayetana de Alba no llegaron a conocerse.

Cuando la aristócrata aceptó que Capel la retratara, las gestiones ya fueron rápidas. Cayetana de Alba recibió a Capel el 5 de septiembre pasado en el palacio de Liria para una intensa sesión de fotos, en la que ella posó sentada en una señorial silla ubicada sobre una noble alfombra.

El artista palentino llevó una cámara con teleobjetivo para captar mejor los gestos de la duquesa y los detalles del escenario. «Ella no tuvo ningún inconveniente en el posado, y nada más sentarse, me gustó la postura que adoptó, y es la que se ha llevado finalmente al cuadro», explica el pintor con la serie fotográfica en las manos. Capel detalla que durante la sesión de fotos no se encontraba el marido de Cayetana.

El cuadro lo comenzó en octubre y prácticamente lo remató el pasado lunes, cuando se dio cuenta, durante la sesión de fotos que realizó para este periódico, que había que dar algún retoque al rostro de la duquesa, lo que evidencia el detallismo y el celo profesional con que Capel trabaja su pintura.

El pintor palentino reconoce que ha suavizado algún rasgo de la protagonista del retrato. «He querido dar más dulzura a la imagen», puntualiza. El fondo ha quedado en una mancha de tonos oscuros y rojos, ya que ha eliminado de la fotografía original la decoración y los muebles del señorial palacio madrileño. «Mi idea ha sido resaltar más su figura, incluso quise restar importancia a la alfombra para que quedara todavía más remarcada la duquesa», asegura el artista señalando el cuadro, que tiene una dimensiones de 1,46 por 0,97 metros.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla Capel y la mirada de la duquesa

Capel y la mirada de la duquesa