La Federación de Béisbol carece de actividad deportiva, pero recibe dinero público

El pasado 19 de octubre el Boletín Oficial de la Junta de Castilla y León se hacía eco de que la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol, a través de su presidente José María Trigueros Lorenzo, iniciaba del proceso electoral para elegir representantes en la asamblea general y la presidencia, tal y como le ordena la legislación vigente en año olímpico. Además, hacía hincapié en que el reglamento, el censo, calendario, junta electoral y todo tipo de mecanismos administrativos estaban ajustados a derecho tal y como marca la ley. Han pasado los días y no se tienen noticias de las elecciones. ¿Seguirá José María Trigueros, como ha ocurrido en los últimos años, de presidente? ¿Pero de qué Federación? ¿Pero existe una Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol? Unas preguntas cuya respuestas se quedan en el limbo. No hay competiciones, no hay torneos, no hay promoción, nadie sabe nada de dicha federación salvo a la hora de presentar el escrito de convocatoria de elecciones, un trámite imprescindible para dar una mínima legalidad a la Federación.

De entrada la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol aparece con una cartelería en la que se dice miembro de la Federación Española, pero allí ni les conocen ni se les espera. «Hace muchos años que no sabemos nada de ellos y desde luego desconocemos si hacen competiciones o cualquier otra actividad. Desde luego con nosotros hace años que perdieron el contacto», comentan desde la Secretaría de la Española. De hecho en su página web, Castilla y León aparece como una región sin actividad en estos deportes. «Creo que alguna vez un grupo de sudamericanos montó un torneo en Castilla y León, pero entre ellos, al margen de cualquier federación», recuerdan en la Española.

Un único jugador federado

Y quizás esa fuese una de las poquísimas actividades de béisbol y sófbol en la región. En 2012 hubo dos colegios públicos, uno en Boñar (León) y otro en Ávila, que sí tuvieron una actividad de béisbol y sófbol al apuntarse al programa 'Batea y corre', pero estaba auspiciado por la Federación Española. «Lanzamos este programa para promocionar nuestro deporte y enviábamos un kit de juego. Esos dos colegios fueron los únicos de Castilla y León que se apuntaron», afirman desde la Española.

Así pues, la actividad es prácticamente nula de la Federación Castellano-Leonesa. Y de hecho, el propio Consejo Superior de Deportes tiene contabilizada una única licencia federada masculina y ningún club en la memoria correspondiente a 2011... y en la de 2010, 2009, 2008, 2007, 2006, 2005... ¿Cómo se hacen unas elecciones sin clubes ni licencias deportivas? Del 2005 al 2007, ni una sola licencia.En 2008 y 2009 inscribió una. En 2010, dos licencias masculinas y una femenina, y en 2011, tan solo una masculina. Por supuesto, en todos estos años, ni un solo club inscrito.

Pero sí que están atentos a las subvenciones. Este mismo año, recibirán de la Junta de Castilla y León 3.150 euros como subvención, apoyada en unos cursos de anotadores y árbitros y de los que se han presentado los correspondientes justificantes ante la administración autonómica.

En la Federación Española no tienen conocimiento de esta actividad. «Desde luego que esos cursos no pueden estar homologados porque deberían pasar por la Española», afirman, aunque también reconocen que «si solo son para las categorías inferiores....». Y así es porque todos los cursos han ido dedicados a minibéisbol y minisófbol. Pero ni los escolares de la Fundación Municipal Deportiva de Valladolid ni de Laguna tienen actividades de esos deportes.

Mantenimiento

También el año anterior la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol recibió otra subvención de la Junta de 4.000 euros, y en años anteriores también fue obsequiada con cifras similares, pese a que su actividad fuese prácticamente inexistente. Desde la Junta se esgrime que en ocasiones las subvenciones se conceden para los gastos de mantenimiento de la propia Federación.

A pesar de las numerosas llamadas a la sede federativa, en la calle Rosa Chacel, 12, de Laguna de Duero, la Federación Castellano-Leonesa no ha facilitado en ningún momento ni un solo dato sobre clubes, jugadores, competiciones ni nada similar. En la Junta reconocen tener inscritos a varios clubes de béisbol, si bien casi todos aparecen con el domicilio en la misma calle Rosa Chacel, 12, o ya han abandonado ese deporte. La única actividad de béisbol que recoge la Junta de Castilla y León en el ejercicio pasado es la solicitud de subvención de un club de Zamora, Los Bravos, para hacer un triangular. A dicho club, compuesto por sudamericanos, le fue denegada la subvención. A lo mejor es que no estaban federados...

Empresas anejas

A todas estas irregularidades y desconcierto, la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol suma una más, que quizás tenga mayor calado. Las federaciones deportivas son por definición entidades sin ánimo de lucro y por tanto no es normal que la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol, a la que apenas se conoce actividad deportiva ninguna, sí que en cambio aparezca con una gran actividad en el registro mercantil.

Así , el pasado 20 de marzo, el Boletín Oficial del Registro Mercantil, da conocimiento de la creación de la empresa Bunviitor SLL., que comienza sus operaciones el día 1-3-2012 y cuyo objeto social es la «organización, realización y promoción de toda clase de actividades deportivas y culturales, así como también la intermediación de comercio en general, de servicios varios y productos diversos, especializados o no, al por mayor o al por menor, para autoconsumo propio o venta a otros, etc».

El domicilio social de la empresa en cuestión es C/ Rosa Chacel, 12 (Laguna de Duero) y el capital social es de 100.000 euros. Y en el capítulo de nombramientos, el administrador único es ¡la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol!

Es decir, una federación deportiva sin ánimo de lucro es la administradora única de una empresa que se ha formalizado con un capital social de 100.000 euros.

Pero no se queda ahí, justo un mes después, el Boletín Oficial del Registro Mercantil anuncia la creación de la empresa Maibine Global Corporation SLL., con idénticas características de objeto social que la anterior, sita en el mismo domicilio de C/ Rosa Chacel, 12 (Laguna de Duero) y también con un capital social de 100.000 euros. Y por supuesto, como administrador único ¡la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol!

Si tenemos en cuenta que dicha federación se encuentra en pleno proceso electoral, quiere decir que el nuevo presidente podría administrar dos empresas cuyos capitales sociales suman nada menos que 200.000 euros, que no está nada mal para una federación deportiva sin ánimo de lucro y que no tiene actividad deportiva ninguna.

Quizás por ello se explica el oscurantismo que existe en dicha Federación, inscrita oficialmente en la Junta de Castilla y León y que además se ha llevado, al menos en los dos últimos ejercicios unos 7.000 euros en subvenciones autonómicas.

Desde la publicación del anuncio del inicio de las elecciones a la presidencia, la Federación Castellano-Leonesa de Béisbol y Sófbol parece haber desaparecido del mapa. Nadie da razón de lo ocurrido en las elecciones ni ningún tipo de explicaciones. ¿Habrán elegido ya presidente? ¿Qué oculta realmente dicha Federación?