Beatriz Escudero rompe el grupo municipal popular a diez meses de las elecciones locales

La portavoz del grupo municipal del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Segovia, Beatriz Escudero, ha relegado de sus funciones a tres de los doce concejales que integran la bancada de la oposición local que ella misma lidera. Los ediles apartados son César Martín, Elena García Gil y Mercedes Álvarez Campana, quienes, según expuso Escudero, abandonarán sus puestos en las comisiones respectivas en las que participaban. Tampoco serán llamados a las reuniones del grupo municipal y dejarán de asistir a actos públicos en representación del PP local.

La también senadora segoviana hizo hincapié en que la decisión adoptada ha sido puramente personal. La tomó el pasado jueves y fue transmitida anoche en un encuentro mantenido por la agrupación municipal. También precisó que tanto la dirección provincial del partido, como la regional y la nacional han sido informados y apoyan la resolución.

El detonante de la exclusión de los tres concejales ha sido la votación del pasado Pleno en el que dos votos en blanco procedentes de la bancada popular evidenciaron la fractura interna que padece el grupo que lidera Beatriz Escudero. La moción por la que el PP exigía al alcalde de Segovia que a su vez pidiese al edil de Deportes, Javier Arranz, que devolviera su acta de concejal se saldó con una votación secreta en la que la propuesta defendida por el popular Miguel Ángel Antona fue rechazada con los esperables trece votos en contra de los socialistas, a los que se sumaron los dos sufragios en blanco procedentes del grupo popular. No se trata de buscar chivos expiatorios ni culpables, anticipó Escudero.

La portavoz desgranó los prolégómenos y el epílogo de la votación de la discordia y aseguró que, tal y como se acordó en una de las reuniones previas mantenidas por el grupo municipal, únicamente se hubiera autorizado a la edil Josefina García su ausencia a la sesión plenaria debido al dilema moral que se le planteaba de exigir la renuncia al marido de una familiar suya o seguir la disciplina de partido. Escudero preguntó el mismo día del Pleno quiénes habían sido los dos concejales díscolos, sin que ninguno sumiera su responsabilidad. Ayer reiteró su interrogante y todos insistieron en su 'inocencia'.

Para la portavoz, se ha generado un clima de desconfianza entre los propios integrantes de la agrupación municipal del PP y la gravedad de los hechos acaecidos impiden la viabilidad futura del grupo ante este mar de dudas. La del jueves pasado no ha sido la primera vez que aflora la fractura del grupo de la oposición después de que hace tres meses cuatro ediles populares -César Martín, Elena García Gil, María José Uñón y Mercedes Álvarez Campana- abandonaran un Pleno municipal durante veinte minutos y no votaron contra la moción de los socialistas para acordar que cualquier concejal que quiera ausentarse deba pedir la autorización del alcalde o, en su caso, justificar su falta de asistencia.

Beatriz Escudero, al apartar a los tres concejales, ha querido dar un golpe de autoridad en la mesa. El Comité Ejecutivo del PP segoviano que preside Francisco Vázquez será el que trate la situación y qué hacer con los tres ediles relegados. Lo que haga el presidente del Partido Popular de Segovia será lo mejor para el grupo municipal, anunció la senadora. Con la exclusión de los tres concejales, la portavoz de la oposición en el Ayuntamiento de la capital se deshace de cualquier responsabilidad sobre ellos, aunque precisa que no pedirá a la dirección ningún tipo de media contra los ediles. César Martín, Elena García Gil y Mercedes Álvarez Campana generaban dudas ciertas después de los dos indeseables votos en blanco del último Pleno, apuntó Escudero, quien tacha a quienes se saltaron la disciplina del partido de mentir a sus compañeros de formación. Tampoco ahorró críticas, quejas y reproches hacia quienes abandonaron la directriz de voto. No puedo tolerar la cobardía de escudarse en el anonimato del grupo, sentenció después de que insistir en que ninguno de los ediles populares confesase si había votado en blanco. Si indigno es romper la disciplina del partido, más indigno es ampararse en el anonimato, agregó visiblemenete molesta con unos concejales díscolos a los que toldó de desleales e insolidarios.

Los segovianos no se merecen enredos de barra de bar ni conspiraciones de mesa camilla, añadió Beatriz Escudero. A preguntas de los periodistas, la portavoz del PP en el Consistorio segoviano declaró que no me cabe duda de que hubo una connivencia entre representantes de la agrupación local que lidera y del grupo municipal socialista para establecer la votación secreta en el Pleno del jueves a la moción sobre Arranz. Me he sentido traicionada por amigos, concluyó. La portavoz rompe la ya maltrecha unidad de la formación con su decisión de apartar a los ters concejales a diez meses de las elecciones locales.